Hoy, desde la 10 de la mañana, la ex esposa de Nisman y la fiscal de la causa se verán las caras, en un intento por destrabar el expediente. Por tercera vez, Arroyo Salgado frenó una pericia clave dispuesta por Fein
En esta oportunidad, la jueza de San Isidro objetó un estudio criminalístico y reclamó su «nulidad». Había hecho lo mismo con el llamado a la junta médica y con el análisis sobre teléfonos y computadoras del funcionario fallecido.
Un nuevo obstáculo se interpuso en el sendero que pretende descubrir por qué el ex fiscal que investigaba el atentado contra la AMIA, Alberto Nisman, está muerto. Por tercera vez en las últimas semanas, una medida de prueba relevante, ordenada –acaso tardíamente– por la fiscal Viviana Fein, fue objetada por la jueza federal de San Isidro Sandra Arroyo Salgado, ex esposa de Nisman y querellante en el expediente. Se trata del peritaje criminalístico que Fein dispuso la semana pasada y que ayer fue atacado por Arroyo Salgado con un planteo de «nulidad».
Parecen escarceos previos a lo que será la batalla de fondo, que tendrá su primer capítulo esta mañana, a las 10, en el edificio de la Cámara del Crimen porteña, sobre la calle Viamonte. La jueza Fabiana Palmaghini comenzará a resolver hoy si la fiscal Fein seguirá o no el frente de la investigación de la muerte del ex titular de la UFI AMIA. La conjugación del verbo, «comenzará», obedece a que probablemente la resolución no se conozca hoy sino mañana, después de un análisis extenso sobre una cuestión que puede marcar un antes y un después en la causa.
Fein fue recusada por Arroyo Salgado por la designación presuntamente irregular del criminólogo Enrique Prueger como perito oficial. Prueger, quien públicamente había abonado la teoría sobre el «suicidio» de Nisman, ya no está en la causa. Palmaghini, fungiendo como jueza de garantías, anuló su designación.
Prueger fue sólo un elemento más en una larga lista de diferencias. Además de ser el emergente de una situación de enfrentamiento entre Arroyo Salgado y Fein, la recusación podría incluso derivar en una denuncia penal contra la fiscal.
Entretanto, la jueza de San Isidro sigue cuestionando, con todas las herramientas que le permite el Código Procesal Penal, la investigación que intenta (a los tropezones y con innumerables flancos vulnerables) la fiscal. Ayer, tras un fin de semana largo en el que prácticamente no hubo actividad en el expediente, Arroyo Salgado pidió la «nulidad» de la convocatoria de Fein al peritaje criminológico. Es la tercera oportunidad en que, ante una decisión de Fein para avanzar en medidas de prueba centrales para determinar qué pasó con Nisman, su ex pareja se opone e interpone recursos que obligan a suspenderlas. Ocurrió con el peritaje de los teléfonos y las computadoras del difunto fiscal, con la junta médica y, ahora, con la experticia criminalística. El trabajo sobre los teléfonos y computadoras ya comenzó, pero no estará completado sino hasta finales de abril; sobre la cumbre de médicos, sólo se resolverá cuándo y cómo se hará después de la decisión sobre la continuidad de Fein. Pero el trabajo criminalístico tiene una envergadura mucho mayor, a punto tal que un trabajo de esa naturaleza es el que le permitió a los peritos de parte de la propia Arroyo Salgado llegar a la conclusión que indica que su ex pareja fue asesinada.
La fiscal Fein dispuso la semana pasada que los peritos de todas las partes, incluidos los expertos de la División Homicidios de la Policía Federal, concurrieran el lunes próximo al departamento en el que vivía Nisman para iniciar el trabajo de reconstrucción de su muerte. Ello, tal como lo anticipó Tiempo Argentino durante el fin de semana, es hoy harto improbable. Ante un planteo similar, Fein suspendió la junta médica.
Arroyo Salgado argumenta que ambos peritajes, el criminalístico y el médico, deben ser uno solo, y realizarse al mismo momento por un equipo interdisciplinario que evalúe cada una de las variables en contexto. La jueza Palmaghini lo definirá esta misma semana.
El expediente tuvo también otro movimiento significativo en las últimas horas. El abogado Maximiliano Rusconi, defensor del empleado informático Diego Lagomarsino, formuló ayer una presentación en la causa. Pidió que se le permitiera estar presente en la audiencia en la que será debatida la continuidad de Fein. Rusconi defiende la actuación de la fiscal, aún cuando cuestionó determinadas decisiones. Más allá de esas diferencias, reivindica la tenacidad de Fein para seguir adelante con un expediente que tiene casi 4000 páginas de tramitación para un caso que, por ahora, sigue sosteniendo que la principal hipótesis sobre la muerte de Nisman es el suicidio.
Además, Fein aparece como un dique de contención contra las acusaciones, nunca expresadas taxativamente, de Arroyo Salgado sobre su eventual responsabilidad en lo que considera un «homicidio». Rusconi quería estar en la audiencia, pero Palmaghini rechazó el pedido.
Por lo pronto, a las 10, en la sala de audiencias de la Cámara del Crimen, Fein y Arroyo Salgado estarán cara a cara, con Palmaghini como árbitro. No se permitirá la presencia de público. Se prevé una reunión tensa, con munición pesada de ambos lados. “Una reunión tensa”
En el encuentro, la jueza Palmaghini pretende que la fiscal y la ex pareja expongan sus puntos.
Los «frenos» que impulsó la querella
Interrupción de los peritajes a los aparatos electrónicos
El estudio debía realizarse sobre el contenido almacenado en sus teléfonos celulares y computadoras personales. Fue interrumpido a pedido de la querella, que solicitó que la información sólo sea revisada por la jueza. Estará listo recién a fines de abril. Puede surgir información clave para el curso de la investigación porque allí estarán contenidos mensajes de texto, instantáneos, correos electrónicos y cualquier otro material que pueda ser usado para reconstruir las últimas horas de vida del fiscal.
La junta médica, en suspenso hasta decidir sobre Fein
La convocatoria a la junta médica había sido hecha por Fein, pero tras objetar al perito Enrique Prueger, designado por la fiscalía, fue finalmente suspendida. Sobre el especialista, la querellante había cuestionado sus opiniones públicas acerca de que los indicios apuntaban a un suicidio. También se objetó que inicialmente no hubiera presentado credenciales. Sólo se resolverá cuándo y cómo se convocará a la junta de expertos tras de la decisión sobre la continuidad o no de Fein al frente del expediente.
El argumento: dos estudios pero en un mismo peritaje
En las últimas horas, la ex esposa de Nisman pidió la nulidad de la convocatoria realizada por Fein a un peritaje de similares características al que ella realizó de forma particular y que le permitió arribar a la conclusión de que se había tratado de un asesinato. Arroyo Salgado argumenta que los peritajes criminalístico y médico deben ser uno solo, y realizarse al mismo momento por un equipo interdisciplinario que evalúe cada una de las variables en contexto. La jueza Palmaghini lo definirá esta semana.
Fuente: Tiempo Argentino
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