Con un brazo tendido a Macri, UNA resolverá en una cumbre cómo jugará en el balotaje. La reunión será mañana en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA) de la que participará Sergio Massa, José Manuel de la Sota, Roberto Lavagna y la plana mayor del frente que el domingo sacó 5,2 millones de votos, ubicándose en tercer lugar.
“Scioli es el límite”, cuentan que dijo a sus cercanos José Manuel de la Sota en las últimas horas, cuando los jefes de UNA comenzaron a hablar de la posición del espacio de cara al balotaje entre los candidatos presidenciales del Frente para la Victoria y del PRO, Mauricio Macri.
El excandidato de UNA, Sergio Massa, salió tercero en las elecciones del domingo pero obtuvo 5,2 millones de votos, un caudal electoral muy importante que tanto Scioli como Macri necesitan para la segunda vuelta del 22 de noviembre.
Con semejante capital bajo el brazo, Massa se reunirá el miércoles con De la Sota, Roberto Lavagna y la “plana mayor” de UNA en Capital Federal (y no en la ciudad serrana de La Falda, como se había anunciado), donde realizarán una “cumbre nacional” del frente que pretende convertirse en el árbitro del balotaje.
Lo del “límite es Scioli” resulta la posición personal del gobernador cordobés, según afirmó una fuente de Unión por Córdoba a este diario. “No sabemos si Sergio tiene una posición tan tajante”, agregó.
El domingo ya hubo una reunión de UNA en Tigre, donde comenzó a elaborarse un “documento programático” a presentarse en la cumbre de mañana.
Descartado un acercamiento al FpV, son tres las posiciones que se barajaban ayer en UNA, según comentó la fuente consultada: la prescindencia, el acuerdo programático, o una alianza de gobierno con el PRO. Esta última opción, “difícil de cerrar en las bases”, implicaría “una especie de cogobierno”.
Lo cierto es que UNA está esperando la “oferta” de Macri y desde el macrismo cordobés deslizaron que ya hubo contactos directos del líder del PRO con Massa. “Ahora todo depende de Macri; es él quien debe tomar la iniciativa”, se sinceró un funcionario de De la Sota, para quien el alcalde porteño podría ganarle a Sciol en Córdoba “70 a 30”.
Por lo pronto, Macri hizo en las últimas horas recurrentes guiños a los cordobeses. Esta provincia fue el distrito donde más votos sacó como candidato presidencial, y Córdoba Capital la ciudad del país donde más fue votado.
Ayer, en su primera conferencia de prensa tras las elecciones, dijo en obvio doble sentido político que “Córdoba es una masa”. También trató de “capos” a los comprovincianos.
Schiaretti
En cuanto a Juan Schiaretti, el gobernador electo de la provincia, las fuentes aseguran que no jugará electoralmente con Macri ni Scioli en la segunda vuelta.
Hay que recordar que Schiaretti afirmó hace tiempo que su compromiso con Massa, como uno de los jefes del PJ provincial, terminaba el 25 de octubre, y que luego se revería la posición del espacio al que pertenece.
Sin embargo, ayer un delasotista que trabaja en el Centro Cívico reafirmó que la política nacional de alianzas del PJ cordobés es potestad de De la Sota.
No pareciera que el electo mandatario esté dispuesto a enfrentar la postura del saliente. Su posición en las próximas cuatro semanas será meterse de lleno en el armado de su Gabinete y estructura de gobierno.
Cerca de Schiaretti admiten que Macri es «indigerible» para el próximo mandatario, por lo que no creen que se exprese públicamente a favor del alcalde porteño.
De hecho, dirigentes sciolistas que hablaron con este diario admitieron que el resultado del domingo “le dio la razón a Schiaretti” en la decisión de no alinearse con el candidato del PJ. “Si se hubiera sacado la foto con Scioli hoy estaría mal parado”, interpretaron desde el FpV, con pocas esperanzas de revertir el adverso escenario cordobés.
Sin embargo, en el comando naranja destacan que el problema de la mala elección de Scioli a nivel nacional no fue estrictamente el distrito Córdoba sino Buenos Aires y la cantidad de municipios que se perdieron y a los que no podrán contar para la campaña de cuatro semanas de cara al balotaje.
“Córdoba fue uno de los pocos distritos donde se mejoró en relación a las Paso; crecimos casi cinco puntos desde el 14% al 19%. Si no hubiéramos intervenido como se hizo en Córdoba, hubiera sido mucho peor.
También se mejoró en Misiones y en Santa Cruz; todas las demás provincias fueron para abajo”, resaltó un sciolista, para quien la única opción que tiene el candidato del FpV si quiere ganar el balotaje es “sacar muchos más votos en provincia de Buenos Aires”.
Fuente: La Mañana
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