El Real Madrid va hoy a tratar de poner fin a los casi tres años sin conseguir un título cuando se enfrente al Barcelona en la final de la Copa del Rey, en Mestalla, Valencia.
Para los merengues es muy importante ganar este título, no solo porque llevan 17 años sin alzar la Copa, sino porque puede ser un incentivo para la plantilla.
Maxime después del empate 1-1 por la liga española, el pasado sábado, un resultado que prácticamente le aseguró al Barça su tercer cetro consecutivo en el campeonato local.
Esta será la sexta ocasión que ambos planteles se midan en una final de la Copa del Rey, con tres victorias para el equipo catalán.
La última vez que se vieron las caras en este tipo de final fue en 1990, hace 21 años, en la cual el Barça se impuso 2-0.
La mayor diferencia entre ambos fue el 4-0 que le endosaron los blancos a los catalanes en la final de 1974.
Los merengues no gana la copa doméstica desde 1993, y la última vez que disputaron una final de este torneo fue en el 2004.
Para el director general del Real Madrid, Jorge Valdano, esta es una oportunidad importante y tiene confianza en que su equipo puede ganar la Copa del Rey.
Una final merece el esfuerzo máximo, el riesgo máximo, es todo un acontecimiento y por jugarla merece el esfuerzo del recorrido, sentenció Valdano.
El Barça es el máximo ganador de la Copa, con 25 trofeos en las 34 finales que disputó, la última en 2009 cuando le ganó 4-1 al Athletic de Bilbao en este mismo estadio de Mestalla.
José Manuel Pinto reemplazará a Víctor Valdés en el arco del Barcelona, al igual que ha hecho en todos los partidos por la Copa esta temporada.
Mañana son Pinto y diez más, él ha jugado siempre la Copa y la seguirá jugando. Como tengo dos porteros fantásticos, pues eso, Pinto y diez más, declaró la víspera Josep Guardiola, técnico de los culé.
Para el entrenador catalán en una final lo más importante es ganar, por lo que esta seguro que no habrá interpretaciones posibles.
Según Pep uno levantará la Copa y otro no, uno será feliz y el otro no.
Para el entrenador del Real Madrid, José Mourinho, no hay favoritos, el portugués cree que los dos equipos tienen las mismas posibilidades de ganar.
Ya jugué muchas finales y los partidos siempre han sido equilibrados. Es la tendencia natural de estos partidos. Cualquiera de los dos puede ganar, concluyó.
Por su parte, el seleccionador español, Vicente Del Bosque, calificó al partido de este miércoles como la fiesta del fútbol español por excelencia.
Nuevamente las filosofías contrastadas de Mourinho y Guardiola estarán sobre el tapete: el entrenador del Barcelona predica la posesión de balón y la presión constante, mientras que el técnico merengue prefiere apostar a los contragolpes con la velocidad de Cristiano Ronaldo y Ángel di María.
Lo seguro es que esta final no será un encuentro más, será el intento del Real Madrid de cambiar el actual orden de las cosas.
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