Un estudio realizado en 2005 por el Museo de Antropología de la Universidad Nacional de Córdoba determinó que la peperina y la pasionaria son los yuyos serranos que corren más riesgo de desaparecer.
La peperina es uno de los yuyos cordobeses más demandados por las empresas que realizan yerbas compuestas o bebidas del tipo “amargo serrano” y por las herboristerías.
Un estudio realizado en 2005 por el Museo de Antropología de la Universidad Nacional de Córdoba determinó que la peperina y la pasionaria son los yuyos serranos más recolectados y, por lo tanto, los que corren más riesgo de desaparecer.
Les siguen la cola de caballo, carqueja y poleo. En total encontraron que se recolectan 64 yuyos de las Sierras de Córdoba.
El trabajo fue realizado por Gustavo Martínez, a partir de encuestas y entrevistas a recolectores del departamento Santa María. Esta región de Córdoba no es el centro de los yuyeros, que tienen una fuerte presencia en Traslasierras.
El desmonte con fines ganaderos o inmobiliarios también afecta a esta actividad, que en muchos casos es la principal fuente de ingresos de algunas familias.
Un estudio del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (Inta) determinó que el 65 por ciento de los ingresos de la comunidad La Aguadita del departamento Minas depende del incayuyo, porque además es clave para la producción de miel.
Según el ingeniero agrónomo Javier Bustos, hace 20 años en la región de Salsacate y Taninga, en el departamento Pocho, la peperina cubría unas 450 hectáreas. Ahora sólo ocupa unas 30.
El 90 por ciento de la recolección de este yuyo tiene como destino las yerbateras y empresas que fabrican bebidas del tipo “amargo serrano”. Ante la escasez y las dificultades para cultivarlo, algunas empresas ahora lo están reemplazando por un polvo sintético.
El resto de la cosecha se vende en las calles, herboristerías y otros negocios.
Ag. de Noticias: La Voz
Comentar post