Pese a la presencia del Fondo Monetario Internacional (FMI) la inflación oficial no se acercó a las estimaciones de los estudios privados dado que, según la medición del Instituto Nacional de Estadísticas y Censo, avanzó en noviembre un 0,7% y alcanzó el 10% en lo que va del año.
Una vez más, la cifra resultó alrededor de la mitad (o menor) en relación a los números que arrojaron los cálculos privados.
La consultora Finsoport estimó un avance de precios del 1,6%, cerca de Ecolatina y Joaquín Ledesma Asociados, cuya cifra plasmó un alza del 1,7%.
Otros privados estimaron porcentajes de avances levemente más bajos. Para la Fundación de Investigaciones Económicas Latinoamericanas (FIEL) en el anteúltimo mes del año, el incremento fue del 1,4%, y en el centro de estudios Buenos Aires City, del 1,3%.
Así el IPC del Indec vuelve a ubicarse en torno de los valores que arrojó durante los distintos meses del año. Desde abril, el avance mensual se ubicó entre 0,7 y 0,8%.
Los alimentos. El capítulo de alimentos y bebidas del IPC elaborado por el intervenido organismo volvió a ser de los más altos, con un 0,9% de variación positiva, aunque el rubro que mayor subas sufrió fue la indumentaria con un aumento del 1,2%, seguido de equipamiento y mantenimiento del hogar con un incremento del 1,1 por ciento.
Asimismo, la atención médica y gastos para la salud también tuvo una suba importante de 0,9 por ciento.
Para una familia tipo, de cuatro miembros, la Canasta Básica Alimentaria (CBA), que cuenta los requerimiento normativos kilocalóricos y proteicos imprescindibles para un adulto durante un mes, fue de $ 576,13 en noviembre, mientras que, en el mismo período, la Canasta Básica Total (CBT), que considera los bienes y servicios no alimentarios, fue de 1244,11 pesos.
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