El presidente afirmó que tras la salida buscará un mejor pacto, «más justo”. Los norteamericanos se unirán así a Nicaragua y Siria, los únicos dos países no firmantes de los compromisos adoptados en París por casi 200 naciones a finales de 2015
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, cumplió hoy una promesa de campaña y anunció y retiró a su país del Acuerdo de París.
El Acuerdo es el principal paraguas para afrontar la lucha contra el cambio climático, y uno de los logros diplomáticos más importantes de la historia.
Trump puso así a Estados Unidos casi en solitario. Greenpeace lo llamó «paria climático».
De los 197 países que ratificaron la convención de Naciones Unidas, el marco para diseñar la estrategia multilateral contra el Cambio Climático, sólo dos quedaron fuera del acuerdo de París: Siria y Nicaragua.
La decisión de Trump sumó ahora a Estados Unidos a esa cortísima lista. Hasta Corea del Norte ratificó el Acuerdo.
Trump decidió sacar a Estados Unidos del acuerdo pese a la presión del G7, China, el papa Francisco, las Naciones Unidas, CEO de varias empresas de primera línea del país, todos los demócratas, un puñado de figuras republicanas y su propia hija, Ivanka Trump.
La decisión de Trump pone en duda el liderazgo de Washington en el escenario internacional, y socava el emblemático acuerdo firmado en 2015 en de París: ahora, otros países podrían optar por dejar del convenio, tal como hizo Trump.
Trump amplía además la grieta que lo separa del resto de las potencias de Occidente, que han respaldado sin miramientos la ofensiva para proteger el medio ambiente.
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