Fernando Albierro Bertapelle iba a tener su escultura como otros tantos personajes emblemáticos de Córdoba. La propuesta fue cuestionada por contradecir la lucha contra el acoso callejero.
La ciudad de Córdoba desarrolla un proyecto para crear un circuito de estatuas en el área peatonal de centro. En pleno armado, surgió el debate por la colocación de un de las esculturas. En plan original, estaba planeado colocar la imagen de Jardín Florido, un icónico personaje de la ciudad, conocido por sus diversos piropos hacia las mujeres. Desde el Movimiento ADN repudiaron la idea de «homenajear» a un hombre que «se sentía con derecho a decirle algo a una mujer».
Concejalas opositoras piensan que no es aceptable homenajear a Jardín Florido mientras se está luchando contra el acoso callejero. Eugenia Reales (Movimiento ADN) planteó el cuestionamiento a la figura de Fernando Albiero Bertapelle: «Una cosa es si regalaba flores. ¿Pero qué mensaje estamos dando como Concejo Deliberante si a la vez que tratamos proyectos en contra del acoso sexual callejero distinguimos a un hombre que por ser hombre se sentía con derecho a decirle algo a una mujer, y que ella no había pedido?».
La idea original fue planteada por el concejal Héctor Carranza (Juntos por Córdoba). «Creo que plantearlo de esta forma es desconocer la personalidad histórica. Tenía gracia, hacía ingeniosas rimas y no era ofensivo con la mujer, la halagaba», expresó el concejal, pero aceptó que se discuta: «Estamos en una época muy diferente y todos tenemos que trabajar para revertir, desde las grandes hasta las pequeñas cosas, la cultura machista».
Miriam Acosta, presidenta de la Comisión de Género del Concejo y aliada a Carranza en Juntos por Córdoba, discrepó con su compañero: «Pero acá vamos a dar la discusión. No existe la posibilidad de no discutirlo. Entiendo que hay que contextualizar su figura y para ese momento, desde una mirada masculina, no tenía objeciones. Hoy su comportamiento, posiblemente, no lo consideraríamos correcto».
La Voz del Interior, consigna que el circuito de estatuas busca ser votado en dos sesiones. Ya tuvo siete debates en comisiones, que se trabaron en un momento por los años de muerto exigidos para que una personalidad tenga una estatua. El oficialismo ya quería aprobarlo.
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