Un vehículo atropelló a una patrulla del dispositivo antiterrorista francesa en la localidad de Levallois Perret, cerca de París, dejando a seis militares heridos, tres de ellos de gravedad.
El ataque se produjo en momentos en que los uniformados salían de un cuartel. En ese momento, el carro –un BMW negro con un único ocupante- les pasó por encima y se dio a la fuga a gran velocidad, por lo que está siendo buscado por las fuerzas del orden francesas en medio de un gigantesco operativo.
No se descarta que este sea un voluntario y deliverado. De hecho, la sección antiterrorista de la Fiscalía de París abrió una investigación sobre los hechos, que tuvieron lugar sobre las 8:00 locales (6.00 GMT) cerca del Ayuntamiento de dicha población.
Fuentes de la Fiscalía informaron de que se ha abierto una investigación por «intento de asesinato de personas depositarias de la autoridad pública en relación con una empresa terrorista y asociación de malhechores con fines terroristas».
La ministra de Defensa, Florence Parly, aseguró en un comunicado que el autor del atropello está siendo «activamente buscado por las fuerzas del orden» y que «la investigación en curso determinará los motivos y las circunstancias» de su actuación.
De confirmarse el carácter terrorista de la acción, sería la quinta de este tipo que sufre la llamada «operación Sentinelle», con la cual se desplegaron 10.000 militares en apoyo de policías y gendarmes en labores de vigilancia antiterrorista puesto en marcha tras los atentados yihadistas de 2015.
En los últimos dos años, se han perpetrado siete atentados en territorio francés, la mayoría adjudicados a grupos yihadistas como el Estado Islámico, que dejaron más de 200 muertos y cientos de heridos.
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