La reforma laboral, sin presente ni futuro. La CGT manifestó su oposición a la reforma laboral, luego de participar de su elaboración. Carlos Acuña, uno de los triunviros, dijo que «no tiene ningún futuro». La tensión entre el sindicalismo y el gobierno va en aumento y el rechazo de la CGT profundiza ese escenario.
“No tiene ningún futuro”. La frase fue pronunciada por Carlos Acuña, uno de los integrantes del triunvirato cegetista y se refiere a la reforma laboral. Que sí, que no: la cúpula de la CGT tuvo varios idas y vueltas respecto a la reforma laboral pero siempre tuvo participación en el proceso de elaboración. Sus abogados participaron de la redacción del texto final, donde el gobierno acordó quitar algunos puntos. Ahora, en el marco de una campaña de persecución por parte del gobierno y sus brazos judiciales contra dirigentes sindicales, el rechazo fue más tajante.
Carlos Acuña, líder del gremio de empleados de estaciones de servicio y hombre del riñón del gastronómico Luis Barrionuevo, fue el encargado de bajarle el pulgar a la reforma laboral: “No acarrea ninguna ventaja, no tiene equilibrio”.
“La reforma laboral no tiene ningún futuro. Es una reforma que no acarrea ninguna ventaja, no tiene equilibrio”.
Carlos Acuña, triunviro de la CGT
El rechazo de la CGT a la reforma laboral a la que había aceptado ponerle el edulcorante se da mientras el gobierno avanza en el terreno judicial contra dirigentes sindicales. El principal objetivo es Hugo Moyano: el camionero intentó mostrare cercano a funcionarios nacionales esta semana pero la bronca del gobierno traducida en persecución es indisimulable. A Moyano -y a su hijo Pablo- lo acecha una denuncia de la Procelac por presunto lavado de dinero y los datos filtrados del Régimen de Sinceramiento Fiscal. Es la respuesta gubernamental al hecho de que Pablo Moyano fue una pieza clave para impedir el tratamiento de la reforma laboral en diciembre. Tampoco se dará el debate en las extraordinarias de verano y el gobierno recién podrá volver a insistir después de marzo.
Acuña consideró que hay “una campaña de difamación” contra gremialistas y que el gobierno “lo hace para difamar y que no tengamos éxito en los reclamos”.
Por otra parte, el triunviro de la CGT se refirió a la herramienta de los trabajadores en la puja salarial y a la posibilidad de que el gobierno les ponga un techo: “Las paritarias son para que cada sector con cada sindicato, de acuerdo con las posibilidades, discutan los salarios”. Acuña aseguró que “el gobierno no le tiene que fijar el sueldo a nadie” y manifestó con ironía que, de lo contrario, “que hagan un decreto y que les fijen el sueldo a todos y ya está”.
Comentar post