Lo dijo su abogado, Eduardo Barcesat, tras la difusión de un contrato firmado entre Madres de Plaza de Mayo y el contador de Sergio Schoklender
Eduardo Barcesat, abogado de la jefa de Madres de Plaza de Mayo Hebe de Bonafini, desvinculó a su defendida de un polémico contrato firmado con un socio de Sergio Schoklender, Alejandro Gotkin, para la construcción de viviendas sociales destinadas al programa oficial Sueños Compartidos, financiado con fondos públicos.
«Hay varias firmas atribuidas a la señora Bonafini que no son de ella», afirmó el letrado, luego de que ayer LA NACION publicara la existencia del polémico convenio , y anticipó que en los próximos días se presentará ante el juez federal Norberto Oyarbide para denunciar el hecho.
El magistrado aceptó la semana pasada a la fundación Madres de Plaza de Mayo como querellante, eventual damnificada, por las eventuales maniobras de desvío de fondos y lavado de dinero, aunque en la causa no hay ningún procesado ni siquiera Schoklender fue convocado a declaración indagatoria.
Barcesat confirmó al diario Ambito Financiero que presentará en las próximas horas una denuncia ante el tribunal federal porque «Bonafini ha visto como propias firmas que no son las suyas». De todos modos, el anticipo de la concurrencia a hacer una denuncia ocurrió luego de que tomara estado público el contrato de la polémica. Se trata de un convenio que le permitiría a Meldorek, la compañía de Schoklender y en la Gotkin era contador, canalizar los multimillonarios fondos públicos destinados al programa Sueños Compartidos .
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