Los presidentes de Estados Unidos, Barack Obama, y de China, Hu Jintao, mantuvieron hoy en Washington una reunión histórica de tono «sincero, pragmático y constructivo» durante la cual discutieron asuntos de comercio, derechos humanos y seguridad internacional, incluyendo las situaciones en Irán y Corea del Norte.
La de hoy fue la octava reunión entre Hu y Obama. «Juntos -dijo el presidente norteamericano-, hemos demostrado que Estados Unidos y China, cuando cooperan, pueden recibir beneficios sustanciales».
Si bien Obama reconoció que en muchos terrenos ambos países mantienen una «competencia amistosa», luego expresó con candidez uno de los principales motivos que vienen impulsando la profundización de la relaciones entre Washington y Pekín.
«Nosotros queremos venderles todo tipo de cosas», dijo Obama arrancando risas entre los periodistas y funcionarios que colmaban la sala donde se realizó la rueda de prensa.
«Queremos venderles aviones, automóviles y software», redondeó Obama.
China es el principal socio comercial de Estados Unidos, pero el déficit norteamericano en esa balanza de intercambio alcanza actualmente los 270.000 millones de dólares.
Además, Estados Unidos viene protestando de manera insistente contra las presuntas maniobras de Pekín para mantener el yuan subvaluado y, de esa manera, estimular sus exportaciones
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