Afina el lápiz: llenar la mochila será un poquito más difícil ya que las subas en los precios de los útiles vienen con una suba respecto de 2010.
Finalmente llegó la peor noticia para los chicos: en librerías e hipermercados las góndolas comienzan a llenarse de artículos que «presagian» el inicio de clases. A los papás, la novedad tampoco les despierta simpatía. Y es que el precio de los insumos escolares en las góndolas están entre un 20 y un 30 por ciento más caros que en el 2010.
El incremento. «Respecto de enero del año pasado, los precios están un 25 por ciento arriba», sintetizó Miriam de la empresa mayorista Estela Montenegro, en consonancia con otras distribuidoras del ramo, ubicadas en las inmediaciones del Mercado Sur. En esos locales la venta para surtir a librerías minoristas comenzó el 10 de enero, sin embargo, el «aluvión» de compradores comenzarán a llegar puntualmente desde el primer día de febrero.
En donde las góndolas de librería ya se están rearmando es en supermercados, bazares y grandes superficies. «Ya llegó toda la mercadería: entre esta semana y la próxima ya ponemos todo en exhibición», anticiparon desde una cadena de hipermercados.
«Saladita» la cartuchera. Día a Día recorrió algunos de los comercios que «picaron en punta» con el rubro para adelantar algunos precios de la nueva temporada.
Entre los montos que pudimos relevar constatamos que un cuaderno monitor rayado de 24 hojas (elemento esencial para ir a clases) «duele» de 1,29 a 3,99 pesos. Hace 12 meses, un cuaderno de esa calidad cotizaba –máximo- en 2,47. Por su parte, los cuadernos oficio de 80 hojas, salen entre 6,50 y 8,29 pesos.
Los repuestos «familiares» de hojas tamaño «Rivadavia», en tanto, se consiguen desde 14,99 a 49,90 pesos (según marca y calidad), en Ferniplast.
Otros precios recargados se notaron en el rubro «carpetas» tamaño «Rivadavia»: el año pasado una standard oscilaba los $8,40. Hoy por ese valor se consiguen sólo las del tipo «genéricas», con cordones. Con fantasías y broches de metal los precios trepan hasta los $ 12,69, en el Hiper Libertad.
¿Algunos números más? Las canoplas van de los $14 a los $20 (las más «sencillas» son con cierre y las más complejas, de dos pisos y con tapas de metal). Los cuatro lápices de grafito rondan los $3,50 y las 4 lapiceras $8,50.
La docena de lápices de colores primera marca salen 8 pesos, dos gomas lápiz-tinta se consiguen por 1,50 pesos.
La vedette de estos días, los remarcadores fluorescentes para quienes deben rendir en febrero, se consiguen desde los 4 pesos.
«Camine señora, camine». Más allá de la inflación, lo que se percibe tras recorrer varios locales es que -en materia de precios- las diferencias pueden llegar a ser significativas en algunos productos y no siempre los negocios más «carteludos» cuentan con las ofertas más convenientes.
¿Un consejo? Para ahorrarse unos pesos y conseguir la calidad esperada, quizá lo mejor sea no apurarse en comprar. En síntesis: hay que seguir el consejo de la nunca bien ponderada Lita de Lazari y consultar precios antes de largar un billete.
Comentar post