Con la elección de Antonio Caló, el kirchnerismo debuta con CGT propia, el titular de la UOM sería el único Secretario General tras el voto de este miércoles
Los gordos e independientes buscan espacio en las segundas líneas. Sin poder salvar las internas y tironeos entre los sectores que la componen, la Confederación General del Trabajo (CGT) Alsina se prepara para elegir a su próxima conducción, disputa que promete ser ardua en cuanto al reparto de poder sindical entre las facciones que integran la oposición antimoyanista.
Mientras “los gordos” -representados por Armando Cavalieri (Comercio); Carlos West Ocampo y Héctor Daer (Sanidad) y Oscar Lescano (Luz y Fuerza)- y “los independientes” -que nuclean a Andrés Rodríguez (UPCN), Gerardo Martínez (UOCRA) y José Luis Lingeri (Obras Sanitarias)- insisten ampliar la conducción entre los gremios más representativos, al punto de proponer hasta último momento un triunvirato, el titular de la UOM y principal candidato de la Casa Rosada, Antonio Caló, volvió a mostrar sus dudas ante la convocatoria gremial para concretar una conducción compartida.
«Un cuerpo con tres cabezas es un monstruo», opinó Caló, que en septiembre logró un tercer mandato en la UOM hasta 2016, y volvió a expresarse en contra de la propuesta del resto de la CGT, que aboga por espacios compartidos en el poder.
«Yo siempre estuve a favor de la conducción unipersonal», afirmó el dirigente metalúrgico. No obstante, dejó claro que se adaptaría a cualquier decisión que tomara el resto de la Confederación oficialista. «Si la decisión final es la de un cuerpo colegiado también la iba a aceptar», remarcó.
Sin embargo, en una reunión a contrarreloj en la sede de UPCN, los gremios acordaron que se elegirá como único representante a Antonio Caló. Así lo anunció Roberto Fernández, titular de la Unión Tranviaria Automotor (UTA), al término de más de tres horas de deliberaciones, a la agencia DyN.
A pesar de los trascendidos de los últimos meses, Caló cuenta no sólo con la aprobación del cristinismo para conducir la nueva CGT, sino también con el visto bueno del Movimiento de Acción Sindical Argentino (MASA), integrado por la Unión Tranviarios Automotor (UTA), los taxistas y docentes particulares.
La candidatura de Caló no es el único punto de disputa. Todavía no está definido quiénes lo acompañarán en el Consejo Directivo.
Por el lado del MASA, resuenan nombres como Omar Viviani (taxistas), Roberto Fernández (UTA), Omar Maturano (UTA), Norberto Di Próspero (legislativos), Horacio Ghilini (docentes privados) o Jorge Lobais para acompañar a Caló. Mientras tanto, Andrés Rodríguez (UPCN) y Héctor Daer (Sanidad) podrían acompañar al metalúrgico, asegurando la representatividad de los gordos en la cúpula sindical.
«Todos somos concientes que debemos llegar a la unidad porque individualmente no somos nada», admitió Lingeri días atrás, tras una reunión en UPCN junto a Martínez, Cavalieri y Daer.
Mientras tanto, el barrionuevismo se mantiene en silencio, aunque ya ha dado muestras de avalar la gestión de Hugo Moyano en la Confederación.
La división entre el ala K de la central obrera y la CGT Azopardo, a cargo del camionero Hugo Moyano, se precipitó tras la ruptura entre el moyanismo y la Rosada. Frente a la identificación del espacio gremial con el Poder Ejecutivo, el metalúrgico puso paños fríos a las acusaciones: «El chico recién va a nacer mañana, déjenlo caminar y después vemos».
Quién es Saavedra. Mientras tanto, el titular de la CGT Azopardo, Hugo Moyano, no ahorró ironías sobre el destino de los sindicalistas que se oponen a su conducción. «Dicen que van a ser una especie de Primera Junta, el tema es quién hace de Cornelio Saavedra», bromeó el líder camionero, cuando todavía resonaban los rumores de la creación de un triunvirato.
«Ellos están cómodos con los que dicen a todo que sí, con los que sonríen, los que hacen puchero y los que festejan cualquier estupidez que dice la presidenta (Cristina Fernández de Kirchner)», acusó Moyano, en directa alusión a los gremialistas que se muestran cada vez más alineados con la sintonía fina del Gobierno.
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