Sube el costo de asegurar autos con GNC. Algunas compañías aumentan por encima del promedio las cotizaciones para los autos con gas. Otras, no los reciben. Pasa especialmente con los autos más viejos.
Para los 224 mil que tienen en Córdoba un vehículo con GNC, la ventaja –por la economía– es incomparable. Por la diferencia entre el precio del gas y de la nafta, el costo de la instalación se amortiza rápidamente y el ahorro mensual en combustible es una gran solución para los presupuestos.
Sin embargo, a la hora de asegurar el auto, hay una mala noticia: los costos de las primas están subiendo por encima de lo que aumentan para los autos sin gas. Incluso, algunas compañías no los reciben.
Las razones no son otras que un incremento en la siniestralidad de los vehículos con GNC respecto de los que no tienen el tubo amarillo en el baúl.
“Por un lado, el equipo de gas es cada vez más tentador para los ladrones, tanto por el tubo, como por el resto de los componentes del equipo”, dijo a Día a Día Daniel Layús, presidente de la Asociación de Productores Asesores de Seguros de Córdoba (Apas). “Hay que tener en cuenta que un equipo que en algún momento costaba 4 ó 5 mil pesos, ahora vale más de 10 mil”, completó.
La otra causa de las subas radica en lo que los productores de seguros llaman “exposición al riesgo”. La posibilidad de un siniestro aumenta mientras más se usa el auto y “se presupone que alguien que le pone GNC al vehículo es una persona que lo usa mucho”, explicó Layús. “Las calles son un desastre, cada vez hay más autos y el riesgo de accidente está presente cada vez con más frecuencia”, dijo el referente de los productores de seguros local.
Primas. Los aumentos de las primas para todos los vehículos en general, entre 2012 y 2013, han sido del orden del 20 por ciento. Sin embargo, en el caso de autos con GNC, se llegan a registrar incrementos de hasta el 50 por ciento a la hora de la renovación. “No son todas las compañías, son algunas, pero existe. Incluso, una ya no toma más autos con gas”, reconoció Layús.
Por ejemplo, una de las compañías con más autos asegurados en el país (más de 100 mil) y alta presencia en Córdoba (tiene el 14 por ciento del mercado local) subió la cuota del seguro (“Terceros Total” para un VW Golf) de 300 a 470 pesos. Se trata de un 56 por ciento de aumento. Además de la suba por inflación, la causa, según explicaron desde la empresa, está en la alta siniestralidad de los autos con GNC, tanto por robos, como por accidentes.
Para un VW Gol 2003, radicado en Córdoba y conducido por un varón de 25 años (estos dos datos también influyen en la exposición al riesgo y, por ende, varias compañías lo tienen en cuenta al presupuestar las primas), la cotización con una empresa del grupo AIG es de 331 pesos (sin GNC) y 403 (con GNC), un 21 por ciento de diferencia. Para el mismo vehículo, otra empresa cotizó por el mismo auto 349 y 408, respectivamente. O sea, 17 por ciento más para el auto con GNC.
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Algunas, 50% de suba
Más arriba. Cuando llega la renovación de la póliza, cada vez más compañías aplican ajustes mayores al de la inflación para los autos con gas. El aumento promedio es del 20 ó 25 por ciento, pero con gas, llegan a ajustar hasta el 50 por ciento, en especial a los autos de más de 10 años.
Tentación. Según las compañías, son más robados (por la tentación del tubo y del resto de los componentes) y están más expuestos a accidentes porque se presupone que quien le pone GNC le hace muchos kilómetros más al auto.
Mercado. Si bien cuando se denuncia el robo de un equipo al Enargas, en teoría, éste lo inutiliza, el mercado negro de las obleas persiste y se “esquivan” los controles.
6 meses. Se considera que un auto, luego de ser asegurado, tiene su primer siniestro a los seis meses, en promedio.
Cuidado. Ni se le ocurra, para evitar el ajuste, no declarar el equipo de GNC. Esto constituye un dolo sobre la declaración de los bienes constitutivos de su vehículo. Más aún si el bien no considerado incorpora un riesgo de mayor siniestralidad por robo o por seguridad. Por lo tanto, las compañías de seguros pueden no responder ante un siniestro, aunque el equipo de GNC no tenga nada que ver.
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Las motos, un perno
El gran problema del mercado de los seguros, sin lugar a dudas, es la exponencial circulación de motos.
“La enorme cantidad de motos que hay en la calle ha multiplicado el riesgo de accidentes”, explicó Daniel Layús (Apas). Esto genera una suba mayor en las primas, ya no por el valor de los vehículos, sino por el costo que le suponen a las compañías los siniestros.
Repuestos. Otro elemento que influye sustancialmente en el costo de las pólizas son los valores actuales de los repuestos, “que suben más que la inflación y, además, en muchos casos no se consiguen”, dijo Layús.
Otro drama: las aseguradoras “baratas”, que ofrecen coberturas de responsabilidad civil con cuotas de 150 pesos por mes, pero que, según el dirigente, “a la hora de un siniestro, no responden”.
Fuente: Día a Día
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