La CGT analiza planteo judicial por Ganancias. Lo anticipó José Pihen, de la central obrera oficialista. El acto contra el cobro del tributo reunió a gremios de las dos CGT y a unos 4 mil manifestantes.La CGT Regional Córdoba –que concretó ayer a una masiva protesta contra el cobro del Impuesto a las Ganancias– analiza realizar un planteo ante la Justicia Federal para evitar el cobro de ese tributo a los trabajadores. El delasotista José Pihen, secretario adjunto de la central obrera, dijo que la CGT estudia presentar en el corto plazo una presentación ante la Justicia Federal para evitar el cobro de Ganancias a los empleados en relación de dependencia. Dijo que “ya está técnicamente lista” una opción que prevé un modelo de presentación individual para la actualización de las escalas y se avanza sobre otra alternativa de una sola presentación colectiva de la CGT
La protesta reunió a los cuerpos orgánicos de medio centenar de gremios de la CGT delasotista, a lo que se sumaron los sindicatos de Luz y Fuerza, de municipales de Córdoba (Suoem) y de Camioneros que integran la central Rodríguez Peña.
En el caso de lucifuercistas y municipales, hubo un abandono de tareas a media mañana en la Epec y las dependencias de la municipalidad capitalina.
Con sus cuerpos orgánicos concurrieron el SEP, la UEPC, Smata, UOM, Comercio, Bancaria y Camioneros, entre otros.
El principal ausente fue el gremio de recolectores de basura (Surrbac), cuyo titular, Mauricio Saillén, encabeza la CGT Rodríguez Peña, aunque el jefe de la CGT nacional, Hugo Moyano, lo removió del cargo.
Tanto Suárez como Pihen convocaron a la unidad gremial para reclamar por Ganancias y otras demandas del movimiento obrero. “Contra todas las especulaciones, estamos juntos peronistas, radicales, socialistas y kirchneristas, para reclamar por lo nuestro, sin importar lo que digan las figuras políticas y la dirigencia nacional”, afirmó Pihen. El acto se extendió por menos de una hora, sin que se produjeran incidentes.
Kirchnerista crítico
Rubén Daniele (Suoem). “Sigo siendo uno de los que apoya a este Gobierno, pero como crítica constructiva, creo que le conviene corregir inmediatamente esto, porque si no va camino a una gran pelea con el movimiento obrero en su conjunto. Ahora podemos llegar a cuatro millones de aportantes antes de fin de año y será un gran problema. El Gobierno tiene que elegir si se anima a meter mano en sectores altamente rentables de la economía o si insiste con esto que va a traer problemas”.
Fuente: La Voz
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