Tras los comicios, la oposición exigirá ocupar la presidencia de Diputados Si los partidos enfrentados al Gobierno logran un triunfo en octubre, apuntarán a reclamar el control de la Cámara baja; la Presidenta adelantó que si el kirchnerismo es primera minoría defenderá el puesto
El debate ya se instaló, y lo hizo la propia Cristina Kirchner. Sucedió el miércoles pasado en Tecnópolis, cuando descargó su furia contra la oposición , en particular contra Sergio Massa, tras la derrota oficialista en las primarias del domingo pasado. Allí, la Presidenta fustigó la idea que merodea en la oposición: ocupar la presidencia de la Cámara de Diputados si el oficialismo pierde la mayoría en ese cuerpo tras las elecciones legislativas de octubre.
«Parece Julián [en alusión a Julián Domínguez] que quieren tu lugar en la Cámara de Diputados, en la presidencia -arrancó Cristina Kirchner-. Y dicen que son el futuro … eso es el pasado, ya lo vi en 2009, ya lo vimos cuando los que no pensaban en nada igual se juntaron para desalojar de la presidencia de la Cámara de Diputados a quien institucionalmente le correspondía, que era la primera minoría. Cuatro años parado, no tuvimos presupuesto en 2010, la menor producción de leyes en cuatro años. Eso tampoco es el futuro, ése es el pasado. Ya lo vi y al país, no al Gobierno, al país no le sirvió.»
Tal vez por olvido o por confusión, o porque se dejó llevar por el enojo, la Presidenta no dijo la verdad de lo que ocurrió en 2009: la oposición nunca desalojó al oficialismo de la presidencia de la Cámara de Diputados. No lo hizo por una cuestión de prudencia porque, como dijo la jefa del Estado, el kirchnerismo aún ejercía la primera minoría pese a haber perdido las elecciones de ese año. Esa prudencia le costó caro a la oposición, ya que el oficialismo, al comando de la cámara, hizo lo imposible para boicotearle las sesiones y el trámite de sus proyectos de ley. Esto, sumado a las dificultades y a cierta impericia de los opositores para trabajar en conjunto, provocó que el Congreso prácticamente se estancara durante 2010.
Con este antecedente, los prudentes de ayer se muestran hoy más combativos. «Si el oficialismo pierde las elecciones y la mayoría en la Cámara de Diputados, la presidencia debe ser para la oposición», coinciden las voces opositoras.
Los únicos que, por ahora, prefieren mostrarse cautos son los seguidores de Sergio Massa, uno de los triunfadores del domingo pasado y candidato a diputado por el Frente Renovador (FR) en Buenos Aires.
«En 2009 yo era uno de los pocos que insistían en que la oposición debía ocupar la presidencia de la Cámara. No lo hicimos y lo pagamos caro. El oficialismo nos boicoteaba el quórum y no podíamos sesionar -indicó a LA NACION Felipe Solá, candidato del FR-. Es algo a pensar después [de las elecciones]. Primero hay que ver los números.»
En el radicalismo, en cambio, predomina la idea de tomar el toro por las astas. «Si la oposición gana en octubre y el número lo permite, deberíamos pelear por la presidencia de la Cámara de Diputados», enfatizó el senador Gerardo Morales. En idéntico sentido se expresó el diputado cordobés Oscar Aguad, quien busca renovar su mandato. «No me cabe la menor duda: la oposición debe ocupar la presidencia [de la Cámara baja] si el oficialismo pierde la mayoría. Es la única forma de que el Congreso deje de ser una escribanía», enfatizó a LA NACION.
El PJ no kirchnerista comparte la estrategia. «Si la oposición gana las elecciones, lo que hay que hacer es asumir el control de la Cámara de Diputados y hacer puntos de acuerdo que son muy simples», dijo Juan Schiaretti, primer candidato a diputado por Córdoba del gobernador José Manuel de la Sota. El propio mandatario apuntaló la idea.
También Francisco de Narváez, primer candidato de Unión por la Libertad y el Trabajo, es partidario de desalojar al oficialismo de los principales resortes de la Cámara baja si pierde la mayoría. «La oposición debe tomar el control de la agenda para tratar los temas que le importan a la gente, no como ocurre ahora», sostuvo a LA NACION el diputado Gustavo Ferrari.
Desde Pro, la candidata a senadora y actual diputada Gabriela Michetti se sumó a las voces opositoras. «Si se tiene el número de mayoría, quiere decir que la gente está pidiéndonos que manejemos nosotros, en ese caso, la presidencia de la Cámara de Diputados o de Senadores, o lo que fuera», opinó.
Su aliada de Unión por Todos Patricia Bullrich abonó la idea. «Cuando éramos mayoría y el kirchnerismo ocupaba la presidencia, nos hizo todas las trampas. Creo que si los números nos favorecen en octubre, habría que ir por ese cargo con lógica moderada, no con venganza», dijo.
También el diputado y candidato a senador por UNEN Fernando «Pino» Solanas se expresó a favor, aunque aclaró que aún no lo consultó en su espacio..
Fuente: La Nación
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