ANTICIPO El futbolista argentino Pablo Bastianini, que juega en el Yokohama Marinos de Japón, manifestó que «se encuentra un poco más sereno», luego de las réplicas del terremoto de 8,9 grados Richter que azotó la zona, ayer. Pero sigue «preocupado» porque hay más movimientos.
«Ahora estoy un poco más sereno, más calmo. Ayer fue un día bastante difícil», relató hoy Bastianini en declaraciones a radio La Red.
El jugador dijo que «volvieron los servicios, volvió la comunicación», pero «sigue la preocupación con lo que está ocurriendo con la planta nuclear».
El argentino, que vive en la ciudad de Yokohama con su esposa y su bebé de tres meses, aseguró que «mantener un poco la calma y la tranquilidad se hace difícil». Y agregó que ayer «el edificio se empezó a tambalear. Era un papel».
«En la sociedad japonesa el tema de los terremotos es habitual. Los chicos desde que van al jardín saben cómo manejarse», señaló y confesó el «pánico» que sintió ayer por el movimiento.
El jugador relató que ayer entrenó con su equipo, pero que hoy la práctica se suspendió «por precaución».
«Lo de ayer fue durísimo y no quiero estar con mi familia si en cualquier momento puede suceder algo similar. Si estuviera solo uno es mas corajudo, ppero cuando uno tienen a un bebé ya las cosas se expresan de otra manera», señaló.
Y concluyó: «Cuando me vine para acá, lo hice más que nada porque el fútbol era una opción económica. Pero uno también tiene una familia, una vida, y a veces el dinero queda a un lado».
Bastianini, de 28 años, jugó en Quilmes, Defensores de Belgrano, Caracas FC.
Comentar post