Pablo Echarri estuvo en Intrusos y, obviamente, el tema fue Jorge Lanata. Luego de la polémica dedicatoria en los Premios Tato, el actor deslizó una fuerte frase en respuesta, metiendo a Sara Stewart Brown, esposa del periodista, en la pelea.
“Ahora entiendo por qué la mujer se va cada quince días de su casa“, disparó el galán. Lanata, entonces, redobló la apuesta: “Yo no voy a decir que él salía con la mujer embarazada de Matías Martin….”.
En el piso de América, Echarri volvió sobre el tema. “Lanata busca show y en esta última vuelta he iniciado una escalada y he ido un poco más allá. Me enojó la actitud de él de dedicarme entre otros compañeros el premio, me enojó mucho más la manera en que se refirió a Paola Barrientos. Me pareció un acto de soberbia muy desagradable”, explicó el actor.
“Me arrepiento de haber involucrado a la esposa, más allá de no haberle faltado el respeto”, agregó. “Creo que ahí está mi infantilidad para manejar la situación. No me va a pasar nunca más en la vida. Ahí se ve la parte de la ira que no debería verse”, analizó.
“Creo que me pasé de irónico; ahí le pegué una plancha. No pido disculpas porque no le falté el respeto a nadie, pero sí reconozco el error al que me llevó la calentura”, señaló Echarri, quien en su respuesta al conductor quería hacer hincapié en que la dedicatoria debería ser para su familia.
Además, reconoció que lo dicho por Lanata en el escenario del Teatro Colón “me toma de sorpresa. Siempre me toma por sorpresa. La atención es un tanto desmedida. Trabajamos de cosas diferentes, pensamos de forma diferente… El enfrentamiento es bastante desigual. Me siento tocado y en desigualdad”, opinó.
Echarri, por otro lado, contó cuál fue su reacción al enterarse que Lanata había mencionado a Nancy Dupláa y Matías Martin. “Me impactó duro cuando me enteré, como a él le habrá impactado lo mío, porque también fue irónico y duro. A Nancy también le impactó. Un grado de mal gusto y falsedad, porque repite el modus operandi de cómo él arma sus informes periodísticos: elige y da por hechos cosas. Aparte se mete con un colega que le importa un carajo. No me siento culpable sino responsable de haber encendido la cañita. No tiene noción de las consecuencias“.
Jorge Rial quiso saber qué podía ocurrir si se lo cruzaba por la calle, a lo cual el actor senteció que “cruza de vereda, todos los saben”.
“Creo que va a ser difícil. No me voy a poder cruzar por la calle porque él va a cruzar de vereda… Es posible que fijara posición. No tendría que transformarlo en un acto de emoción violenta. Pero nos conocemos, ninguno es una carmelita descalza. Como el género masculino, tenemos una forma de defendernos, que ha cambiado mucho con el tiempo. Todos somos muy distintos. En otro momento, tal vez se me hubiera soltado la chaveta y hubiera entrado en una violencia física”, aseguró.
Por último, se refirió a su militancia política: “El Gobierno no baja línea a los actores. Con la nueva Ley de Medios, creo que vamos a tener la posibilidad de opinar y también pelear lo que ganamos. A ninguno le conviene venir a cambiar lo que hizo este Gobierno. Yo estoy comprometido internamente porque soy idealista. Estoy comprometido profundamente y es la idea política que voy a defender hasta que me muera. Que la idea trascienda a Cristina. Tiene que venir gente sólida que pueda representar esa idea. No compro paquetes cerrados”, argumentó.
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