La modelo paraguaya habló del violento asalto que sufrió junto a su novio, el futbolista Jonathan Fabbro, en su casa de Villa Urquiza. Larissa Riquelme, su novio, el futbolista Jonathan Fabbro, y la familia del jugador de River Plate fueron víctimas de un violento asalto en la casa del deportista en Villa Urquiza.
Al menos siete delincuentes ingresaron armados a la vivienda mientras se celebraba el cumpleaños de la mamá de Fabbro y llegaron a amenazar con un cuchillo a una niña de tres años y golpearon al sobrino del delantero, un nene de 4 años que sufre de síndrome de down.
«Dijeron que me iban a secuestrar», contó la modelo paraguaya a la prensa que la esperaba en la puerta de la casa donde ocurrió el robo. Según su relato, los ladrones la reconocieron e insistían en que pensaban llevársela.
«‘A vos te vamos a llevar porque vos sos la mujer, sabés donde está la plata, tenés mucho dinero’, me dijeron. Yo les respondí que no sabía nada. Les dije ‘te doy todo lo que tengo puesto», agregó. Los delincuentes se llevaron pertenencias de las 15 personas que estaban en la casa del futbolista de River Plate.
Además, Riquelme reconoció que les mintió a los ladrones: les aseguró que estaba embarazada para que no la lastimen y no le hicieran daño.
La ex Bailando por un Sueño enfrentó a los medios junto a la madre de Fabbro, mientras que el delantero estaba en el entrenamiento de su equipo, pese a que había sido golpeado en el asalto.
Cuando llegó el momento de contar lo que pasó adentro de la casa cuando se metieron los delincuentes, que golpearon a menores de edad, estuvo a punto de quebrarse: «Me dan ganas de llorar porque fue algo muy triste».
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