Por año, 1.579.000 neumáticos van a la basura. Cormecor tiene un plan para reciclar ese residuo. Se estima que Gran Córdoba genera unas 15 mil toneladas anuales.
La necesidad de reciclar los neumáticos fuera de uso (NFU) que a toda velocidad desecha Córdoba está cantada desde hace años: son un residuo que se genera en enorme cantidad -es gráfica su presencia en los 117 basurales urbanos-; voluminoso y difícil de enterrar, que tarda medio siglo en descomponerse y cuyos componentes pueden reciclarse en diferentes usos industriales con demanda creciente.
Según estimaciones de Regomax, la empresa que montó la primera planta de reciclado de NFU a gran escala en el país, el área metropolitana de Córdoba (Gran Córdoba) genera anualmente un aluvión de 15 mil toneladas de NFU, una parva equivalente en peso a más de 15 mil autos Volkswagen Gol.
Otras estimaciones hablan de más de 10 mil toneladas (10 millones de kilos) tiradas cada año en el distrito.
Por su parte, el Inti (Instituto Nacional de Tecnología Industrial) cita una cálculo que señala que en el país se desechan dos neumáticos por habitante al año.
En cualquier caso, se trata de un caudal gigantesco de basura con alto impacto ambiental, que por necesidad y conveniencia urge reciclar.
Cormecor, la SA. integrada por la Municipalidad capitalina y varias localidades para asumir el manejo final de los residuos, ya trabaja en un plan para eso.
En la entidad, de hecho, aseguran que el sistema de tratamiento de NFU es el más «factible» y simple de montar entre los varios diseñados para procesar las 55 mil toneladas que hoy se entierran por mes en el relleno sanitario de Piedras Blancas.
Y por eso se avanzaría en él en el mediano plazo. «Hay dos empresas, Contrini y Regomax, que presentaron en el workshop que organizamos sendas propuestas para reciclar las cubiertas», precisó Hugo Pesci, asesor técnico de Comercor.
«En los dos casos lo único que nos solicitan es un terreno y que les entreguemos el residuo en puerta, pero no demandan ningún canon o inversión; y ellas están dispuestas a construir la planta de tratamiento de los NFU que insumiría varios millones de pesos y no tiene impactos ambientales complicados», agregó.
Tanto Pesci como Eugenio Pettigiani, miembro del Inti, explicaron que esto deriva del buen negocio en que se está convirtiendo el reciclado de caucho en el país, aplicado en el piso de las canchas de fútbol de pasto sintético.
Eso es lo que elabora Regomax en la planta que montó, con asesoría de Inti, junto al Ceamse, el gran relleno sanitario de Buenos Aires. Esa experiencia es la que propone replicar aquí. Hoy, la demanda supera a la oferta de este material generando oportunidades.
Aluvión
Regomax, firma que recicla neumáticos fuera de uso (NFU) a gran escala en el país, estima que en Gran Córdoba el volumen de ese desecho es de 15 mil toneladas anuales.
Equivaldría a 1.579.000 NFU si se considera que uno de auto (el más numeroso) promedia 9,5 kilos.
Cómo se reciclan para hacer canchas sintéticas
1- Se trituran en forma mecánica
2- Del mismo modo, se separan los tres materiales que los componen: caucho (en un 80%), metal y tela.
3- El caucho se convierte en especie de «bolitas» que se venden a fabricantes de canchas sintéticas. En ellas, se coloca como base del pasto para sumar amortiguación.
Principales destinos de neumáticos reciclados en el mundo:
INCINERACIÓN. Se lo emplea como combustible.
ADITIVO PARA CARPETA ASFÁLTICA. El caucho da mayor elasticidad al pavimento.
BASE PARA CANCHAS SINTÉTICAS. Se combina con el pasto sintético para darle más amortiguación.
Fuente: Día a Día
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