Conflicto mantiene 20 buques parados en puerto exportador*Huelga impulsa los futuros del mercado de Chicago
Una protesta de trabajadores portuarios argentinos mantenía demorados el viernes veinte buques en el área de Rosario, dijo la autoridad del puerto local, una de las mayores terminales exportadoras de granos del mundo.
La huelga, iniciada el miércoles por un reclamo salarial, impulsó los futuros del mercado de Chicago al paralizar la actividad en las plantas ubicadas al norte de Rosario, sede de grandes agroexportadoras como Bunge , Cargill [CARG.UL], Louis Dreyfus, Noble, Vicentín, Molinos y la Asociación de Cooperativas Argentinas (ACA).
«Las plantas están paradas totalmente y los embarques de esas plantas no se están haciendo», aseguró a Reuters Alberto Rodríguez, director ejecutivo de la Cámara de la Industria Aceitera de la República Argentina (CIARA-CEC).
Los buques afectados están a la espera de iniciar o de completar su carga, informó a Reuters un funcionario del Ente Administrador Puerto Rosario (Enapro) que prefirió no ser identificado.
«Todavía no es algo alarmante, pero empieza a preocupar», dijo una fuente de una de las principales corredoras de granos del país.
La protesta, declarada por tiempo indeterminado y cuyo desenlace es aún incierto, incluye bloqueos en los accesos a los plantas que se encuentran junto a los puertos, por lo que también afecta al procesamiento de granos de la nación sudamericana, la mayor exportadora mundial de aceite y harina de soja y la segunda de maíz.
Las plantas paralizadas se encuentran en las localidades de San Lorenzo, San Martín y, desde el viernes, también en Timbúes, todas en los suburbios del norte de Rosario.
PELIGRO DE FUERZA MAYOR
La Asociación del Comercio de Granos y Forrajes (GAFTA, por su sigla en inglés) emitió a sus miembros un aviso sobre la huelga en Argentina, lo que permite a las partes afectadas por la protesta declarar la fuerza mayor para los embarques de granos y derivados.
Fuentes de las firmas agroexportadoras en Argentina advirtieron que sus reservas son bajas y que el fin de semana podrían empezar a quedarse sin granos para la molienda.
Los trabajadores nucleados en la Confederación General del Trabajo (CGT) filial San Lorenzo reclaman un alza de sueldos, pero las empresas calificaron al pedido de «irracional», al considerar que las negociaciones de salarios sólo pueden hacerse por cada gremio por separado y no a través de una central sindical como la CGT.
Las exportadoras realizaron una presentación al Ministerio de Trabajo de la Nación para que solucione el conflicto, pero por el momento el Gobierno no tomó ninguna medida.
«Hemos pedido que (el Ministerio) tome alguna acción para que termine esta situación de impedimento de circulación y trabajo a través de los piquetes», explicó Rodríguez, de CIARA-CEC.
«Estamos esperando que el Ministerio de Trabajo haga algo, pero no tenemos ninguna respuesta a nuestra solicitud que hicimos ayer (jueves). Estamos preocupados y extrañados por esta demora», acotó.
Los empleados en huelga incluyen a gremios como los de seguridad, gastronomía, portuario y limpieza, pero son sólo el 13 por ciento del total de trabajadores de las plantas agroexportadoras, ya que el 87 por ciento son miembros del sindicato aceitero, que ya obtuvo un alza salarial en diciembre.
Los huelguistas piden que su salario mínimo sea llevado a 5.000 pesos (alrededor de 1.250 dólares) como el de los obreros aceiteros, que no están trabajando para no confrontar con los otros empleados.
Fuentes sindicales señalaron que, de todos modos, hay un creciente malestar de los aceiteros con la CGT porque los piquetes de los huelguistas no les permiten trabajar, lo que podría generar más tensión.
«No entran ni la mano de obra ni la materia prima, es decir los camiones, ni tampoco sale el embarque a los buques. Es mayor lo que están perdiendo a lo que estamos solicitando nosotros», señaló Walter Cabrera, secretario de la CGT de San Lorenzo a Radio El Mundo.
De los puertos del área de Rosario -300 kilómetros al norte de Buenos Aires- parte el 80 por ciento de las exportaciones agrícolas de Argentina, pero los embarques suelen ser reducidos en esta época del año, cuando todos los actores del mercado esperan el inicio de la cosecha de soja en marzo próximo.
Según algunas previsiones, el complejo sojero del país sudamericano será responsable este año por exportaciones por unos 22.000 millones de dólares, que representarían un cuarto de los envíos totales de Argentina al resto del mundo.
La protesta de la CGT se da al inicio del período en que habitualmente los sindicatos reclaman subidas de salarios en Argentina, donde una alta inflación ya está provocando rozamiento entre las empresas y los gremios de trabajadores en las negociaciones salariales.
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