Súper 8 y Súper «Chocho». El Verde derrotó a Peñarol por 92-85 y se quedó con el torneo en Formosa.
Puños cerrados, brazos en alto, abrazo cerrado entre todos los héroes de la jornada y un himno que sonará como dulce melodía. El dale campeón… dale campeón… sonó como en las noches más gloriosas de este Atenas (versión 2010). Este Atenas que completó su sobre poblada vitrina con el único título que le faltaba: el del Súper 8. Anoche, el Griego demostró que con paciencia, confianza y trabajo en equipo todo se puede lograr. El múltiple campeón derrotó a Peñarol de Mar del Plata 92-85 y desató el festejo en el estadio Cincuentenario de Formosa.
Ambos equipos tardaron en encontrar el ritmo. Los 40 grados de la tarde formoseña hicieron mella en esos cuerpos gigantes. El Griego fue el primero en anotar, pero después el Milrayitas se adueñó de las acciones y empezó a marcar diferencias. El Verde marraba y los marplatenses se apoderaban de los rebotes para terminar convirtiendo en el aro rival. Leo Gutiérrez (con tres triples) fue imparable desde afuera; Martín Leiva y Kyle Lamonte lo hicieron en el perímetro. Así los hombres de Sergio Hernández se quedaron con el primer cuarto por 25-21.
La reacción. En los primeros minutos del segundo parcial, Peñarol sacó una diferencia de nueve puntos (32-23) y Atenas reaccionó. Lo hizo a través de Miguel Gerlero, el hombre que le cambió la cara al juego del Griego. Un triple de Bruno Lábaque y un doble de Gregory Lewis marcaron el camino de la recuperación. El Verde mejoró su trabajo defensivo y dejó sin el protagonismo que habían tenido en la etapa inicial Gutiérrez, Leiva y Lamonte.
Sebastián González habló con sus muchachos. Fue claro en el pedido: moverse mucho y meterse en el partido. Y Miguelito Gerlero resultó el más obediente. Anotó 19 (4/4 en triples) puntos y con un parcial de 26-19, Atenas se fue al descanso largo 47-44 arriba.
En la primera parte del tercer parcial, el Griego se mantuvo a tiro y el aporte de Gerlero lo llevó a sacar la máxima del juego (56-46), pero en Peñarol reapareció la calidad de Leo Gutiérrez y el goleo de Lamonte. El conjunto de Sergio Hernández ganó el parcial (18-16) aunque no le alcanzó y Atenas lo ganó por la mínima (63-62).
El último capítulo fue con acciones y marcador alternándose entre uno y otro. En Peñarol apareció el cordobés Facundo Campazzo y sus triples pusieron a tiro al equipo marplatense, pero Atenas seguía poniendo todas sus fichas en el hombre de la noche: Miguel Gerlero, el MVP del torneo.
Así el Verde se quedó con el juego por 92-85 y consiguió el título que le faltaba. Del otro lado quedó Peñarol, el campeón en cinco ediciones.
Con un joven plantel, dos extranjeros que acompañan y un técnico que hace sus primeras armas en la máxima categoría, Atenas vuelve a Córdoba súper chocho.
La Figura: Miguel Gerlero.
Su ingreso fue determinante. Con 31 puntos (11/13 en libres, 4/6 en dobles y 4/6 en triples) fue el goleador del juego. Además, fue uno de los hombres importantes en el trabajo defensivo. Desde la banca terminó siendo el segundo jugador con más minutos en cancha.
La Clave: Paciencia.
Atenas supo esperar y construir su propio juego. No se desesperó y apostó como siempre a su trabajo colectivo. Si bien se destacó Gerlero, los americanos fueron determinantes. Hicieron valer su condición de internos.
Comentar post