Para Boca, fue el estreno del nuevo cuerpo técnico, con Julio César Falcioni a la cabeza, aunque el entrenador campeón con Banfield en el Apertura 2009, prefirió guardar a la mayoría de los titulares, que saldrían a la cancha en el superclásico del próximo fin de semana.
Por eso, en el once xeneize reapareció Pablo Mouche y actuó José María Calvo, quien hacía 25 meses que no se ponía la camiseta de Boca (la última vez había sido en diciembre de 2008).
Del lado de Independiente, Antonio Mohamed probó a la base de la formación titular que se prepara para el choque del 25 de enero, ante Deportivo Quito, por el Repechaje de la Copa Libertadores.
Aunque por la ausencia de Facundo Parra, Mohamed decidió armar una fórmula de ataque con dos enganches (Patricio Rodríguez y el debutante Defederico), más Silvera, como referencia en el área rival.
Más allá de los nombres y las camisetas, el equipo de Falcioni mostró la misma actitud que el técnico transmitió en Banfield y en sus anteriores clubes, porque hubo un 4-4-2, con una insistente presión sobre la salida del adversario.
La primera llegada del partido fue para Boca y fuera del molde de lo esperado para el movimiento de piezas en el clásico, porque Insaurralde se mandó al ataque, sin marca, y su remate de media distancia obligó a una estirada de Gabbarini, que mandó el balón al tiro de esquina.
Independiente contestó con una buena combinación entre Patricio Rodríguez y Defederico, que derivó en un ingreso al área de Iván Pérez, pero Calvo llegó a tiempo para cerrarle la puerta al peligro.
Y llegando a la media hora, Defederico se filtró entre los centrales de Boca y quedó mano a mano con Lucchetti, pero el arquero reaccionó con rapidez y rechazó en balón con sus pies.
Pero la contundencia que no tenía Independiente, la exhibió Boca en el primer tiempo, porque a los 43 minutos, Cristian Chávez recibió una asistencia de Méndez, enganchó hacia adentro y definió de zurda al primer palo, dejando sin respuestas a Gabbarini, para poner el 1 a 0.
En el segundo tiempo, Independiente intentó adelantar sus líneas, para asfixiar los movimientos de los volantes de Boca, pero la falta de precisión en el armado del juego, le restó eficacia a su estrategia.
Encima, Boca, con la tranquilidad de la ventaja conseguida en el final del primer tiempo, mostró sus mejores virtudes en el segundo período.
Porque a los 4 minutos del complemento, llegó el golpe de gracia para Independiente, a través de un tiro de esquina de Mouche y una definición de Insaurralde, de cabeza, que apareció en el corazón del área sin marca, para el 2 a 0, que no se movió más.
En el primer partido de esta Copa de Oro, San Lorenzo había vencido a Independiente por tres a dos, y ahora el triangular se definirá el próximo sábado 29, con el choque entre Boca y San Lorenzo, con ventaja para el elenco de Falcioni por la diferencia de gol.
Comentar post