Con Messi brillante, Argentina goleó a EE.UU. y es finalista. Fue 4-0 en Houston. Lavezzi, Messi e Higuaín (2) marcaron los tantos de la Selección. El equipo de Martino jugará el partido decisivo el próximo domingo ante el vencedor de Chile y Colombia.
Con autoridad, jugando un fútbol superlativo y un Lionel Messi histórico, la Selección argentina goleó este martes a Estados Unidos por 4 a 0 y se clasificó a la final de la Copa América Centenario, y jugará su tercer partido decisivo en igual cantidad de torneos que participó.
La goleada argentina se solidificó en los goles de Ezequiel Lavezzi, a los 3 minutos, y Lionel Messi, a los 31, mientras que Gonzalo Higuaín, a los 4 y 40 del complemento, estiró las diferencias para redondear un resultado increíble.
Ahora el conjunto albiceleste deberá esperar por el ganador de la otra semifinal, que este miércoles en Chicago disputarán Chile y Colombia.
Además en Houston, Messi se convirtió en el máximo goleador histórico de la Selección argentina con 55 tantos, uno más que Gabriel Batistuta.
Argentina empezó con todo y un Messi superlativo
Argentina pegó primero, temprano y con una jugada preparada, casi como que le impuso presencia a un Estados Unidos que se quedó sin argumentos.
Es que luego de un córner corto, Lavezzi combinó con Messi, el capitán le envió un pase a la cabeza y el «Pocho» la colocó bombeada ante la dudosa salida de Guzan.
Poco y todo había pasado en apenas tres minutos, pero le sirvió a Argentina para sacarse de encima esa capa de tensión, y, a los siete, casi aumenta con una triangulación entre Lavezzi, Rojo y Messi, que la estrella argentina envió por encima del travesaño.
Con la ventaja Argentina hizo circular el balón, lo controló y jugó con la tibia presión y las inseguridades del equipo local, que nunca pudo entender cómo era el juego que los argentinos dominan tan bien y ellos quieren evangelizar entre los suyos.
Porque Argentina presionó con precisión en cada sector del campo, Banegas se hizo dueño de los balones, Augusto Fernández fue una rueda de auxilio por la derecha y Mascherano ajustó las clavijas cuando había que hacerlo.
Más liberados se mostraron Lavezzi y Messi, pero la estrella del Barcelona fue lapidario en cada intervención y, a los 14, casi termina en gol un feroz contragolpe que Guzan tapó muy bien.
El planteo argentino resultó a las claras la mejor manera de poder contrarrestar a un equipo local que pondera lo físico a la técnica.
El delantero Gonzalo Higuaín estuvo participativo en el circuito de juego argentino, y, si bien tuvo una opción, no pudo concretarla.
Pero, a los 31, llegó la «joya» de la «joya», porque a Messi le hicieron una falta afuera del área y el capitán argentino sacó un preciso tiro libre, que dejó para la postal al arquero Guzan, y se convirtió en el máximo goleador histórico de la selección con 55 tantos.
Lo liquidó enseguida
Para el complemento, Argentina pegó nuevamente desde el inicio, porque, a los cuatro, Banega puso un pase perfecto para Higuaín y el delantero del Napoli le ganó el mano a mano, con varios rebotes, y puso el 3 a 0.
Estados Unidos trató de vender un poco de dignidad futbolística, pero cada vez que intentó aguijonear el fondo argentino aparecieron Otamendi y Funes Mori con una seguridad pasmosa para hacer que las intenciones locales fueron sólo eso.
Cada vez que quiso Argentina colocó el balón en el piso, trianguló, aseguró el balón y cuidó el físico pensando ya en la final.
Sin embargo, una lesión muscular de Fernández y un golpe de caída de Lavezzi forzaron los ingresos de Biglia y Lamela, que nada modificaron en el esquema argentino.
Messi fue un dilema para el fondo de Estados Unidos, que nunca lo pudo controlar, y el DT local se dio cuenta de que nada podía ser lo que él pretendía y sacó a Dempsey, su mejor hombre, cuando los claroscuros fueron muchos.
Argentina reguló el trajín en el ataque, aunque no en el mediocampo, porque apretó bien y cerró cada vez que Estados Unidos insinuó algo, y, a los 37, Messi casi convierte un nuevo gol, pero Guzan se estiró y la mandó al córner.
Para el final, quedó una muestra más de lo que fue el partido, con errores en el fondo de Estados Unidos, un robo de Messi y una estupenda asistencia para Higuaín que definió a la red para el resultado definitivo.
Fuente: Cadena 3
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