El clásico de Avellaneda se tiñó de celeste y blanco en el Cilindro. Y no solo por los colores que vistieron a un estadio repleto de hinchas de La Academia. También porque Racing le ganó 2-0 a Independiente cortando una racha de 11 partidos sin vencer a su clásico rival. Ahora, los de Miguel Angel Russo apuestan a la pelea por el título en este Clausura.
Fue Independiente el que empezó mejor. Dentro de lo parejo de los dos equipos, el Rojo fue algo más claro y tuvo una chance que podría haber cambiado el partido. Leonel Núñez, con un derechazo casi desde el córner izquierdo, hizo temblar al travesaño luego de un pequeño desvío que descolocó al arquero Roberto Fernández. Antes, Julián Velázquez había salvado al Rojo en la línea después de un rebote que dio en Gabriel Hauche tras un mal despeje de un inseguro Assman.
Pero con poco el partido cambió su intensidad y Racing lo supo aprovechar. Despertó Patricio Toranzo y los puntas, que habían quedado varias veces en offside. Cuando se iba el primer tiempo, Toranzo, le picó una pelota a Teófilo Gutiérrez, que de manera inteligente se la sirvió con el taco a Hauche, que solo contra Assmann, fusiló para marcar el 1-0.
Para el segundo, el Rojo no pudo comenzar como en la primera etapa. Al contrario. Fue Racing el que salió decidido a liquidarlo y el que se adueñó de la pelota para nunca más soltarla. El equipo de Russo tuvo más de una ocasión para liquidarlo. Un remate de Pablo Lugüercio, un cabezazo de Gutiérrez, una linda definición de Licht que salvó Assmann. Pero ninguna de esas iba a ser gol.
El trámite del partido marcaba más de un gol de diferencia para la Academia. Pero el resultado no y los miedos no dejaban en paz a la gente local. Pero Racing siguió tocando y jugando como el candidato que quiere ser. El Rojo, como aquel que arrancó el campeonato, sin alma y con menos fútbol todavía. El local lo tenía que liquidar y lo hizo sobre el final.
Teo Gutiérrez entró por atrás de Velázquez para rematar al cuerpo de Assmann, este dio rebote y el colombiano cabeceó por encima del rubio y colocar el 2-0 definitivo. En el descuento, Licht vio la roja por una fuerte entrada a Rodríguez, pero no cambió nada en el partido.
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