Automovilismo. José María López ya es piloto de la Scuderia Fiat de TC2000. En el Cabalén, giró por primera vez con los Linea. «Van bárbaro», dijo.
«Se ve bien Fiat, ¿no?», pregunta José María López (27 años) a los fotógrafos que toman las primeras imágenes del cordobés con el buzo de color rojo de la Scuderia. La marca acaba de sumarlo a sus filas, para que maneje en 2011 uno de los Linea de TC2000.
Y la verdad es que la indumentaria está tan bien diseñada (a los fines publicitarios), que se ve re bien Fiat en grandes letras blancas y por todos lados; sobre todo, en el pecho. Y Pecho sonríe, se lo nota contento; va, viene, habla con los mecánicos, con los ingenieros, con los directivos del equipo. Saluda a los invitados del «sponsor day» (una exhibición dedicada a patrocinantes y medios de prensa), entre quienes está Día a Día.
Estamos en el autódromo Oscar Cabalén, con cielo despejado, un poco de viento y, sobre todo, mucho calor. Se siente: en un nuevo equipo, Pechito empieza a renovarse; lo necesita como nunca, después de uno año en el que las cosas no salieron como en 2009, cuando llegó a pelear por el título de las tres categorías de autos de turismo más importantes del país –incluido el del Turismo Carretera– y se quedó con el de TC2000 (por segundo año) y el de Top Race V6.
Alineados. Pechito se pone su inconfundible casco y se sube a uno de los dos Linea que el equipo llevó hasta el Cabalén. «Son los autos con los que compitieron Emanuel Moriatis y Ezequiel Bosio en San Luis el fin de semana pasado. Sólo que a los motores se les redujeron unas 300 revoluciones para cuidarlos en esta exhibición; comúnmente, tienen un régimen máximo de 7400 RPM y acá están en el orden de las 7100», nos explica Daniel Sancho, el experimentado director deportivo del equipo, cuya base se encuentra en el súper complejo Pro Racing, sobre la autopista a Villa Carlos Paz.
Los Fiat Linea suenan tremendos desde que salen de boxes hasta que vuelven a entrar. En uno de esos regresos, Pechito le tira sus primeras sensaciones a Sancho: «Van bárbaro; muy muy bien eh». Para el director deportivo, las primeras palabras del riotercerense sobre los Linea son absolutamente alentadoras. Auguran un 2011 que permite soñar con un campeonato para la marca que regresó con todo al TC2000 hace dos años.
Cuando Pechito sale a girar de nuevo, después de intercambiar conceptos con los ingenieros, Sancho le confía a Día a Día: «Para nosotros, que él nos diga eso es sumamente importante. Pensá en que viene de correr con los Honda del equipo Petrobras, autos que son un poco la referencia de las últimas temporadas del TC2000».
Pechito vuelve a entrar a boxes; otra vez, mira a los ingenieros y levanta el pulgar. Durante una pausa, nos sintetiza: «Estoy muy contento. Comienzo con el pie derecho, sintiéndome muy bien, muy cómodo. El año que viene, vamos a dar batalla con Fiat. Ojalá peleemos por el campeonato desde el arranque de la temporada».
Desde ahora, dice Fiat en su pecho. Y Pecho se renueva. En buena hora.
Cuatro autos en 211. Fiat pondrá cuatro Linea en pista en la próxima temporada del TC2000. Los pilotos: Pechito, Spataro, Gabriel Ponce de León y el debutante Emiliano López.
Con Emiliano Spataro, a fondo
Si un mérito tiene Emiliano Spataro (34 años) dentro de la Scuderia Fiat es haber desarrollado los Linea; haber colaborado con la marca para que hoy, dos años después de que la casa italiana se metiera de nuevo a competir en el TC2000, los coches sean realmente competitivos; estén para pensar en un campeonato en 2011.
Emi, que durante esta temporada le dio a Fiat las victorias en Neuquén y Santa Fe y que seguirá corriendo para el equipo en la próxima, llevó al autor de esta nota a fondo en uno de los Linea: una experiencia conmovedora en el Cabalén, en el marco del evento que coordinaron con gran dedicación y cuidando todos los detalles Leonardo Destéfano, de Fiat, y Cecilia Milanesio, de Pro Racing.
Temas: TC200
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