Fuentes oficiales paquistaníes han confirmado bajo condición de anonimato la muerte del líder miliciano y rumoreado sucesor de Bin Laden.
El miliciano, de 47 años de edad, también era considerado uno de los posibles organizadores de los atentados terroristas en Bombay de noviembre de 2008, y que dejaron más de 160 muertos.
Para Estados Unidos, Kashmiri era el operativo relacionado con Al Qaeda más peligroso que había aparecido en años. Fuentes de la Inteligencia estadounidense aseguraron en 2009 al magacín ‘Newsweek’ que Kashmiri era «el hombre que hace encajar todas las piezas» de la organización terrorista internacional. Ese mismo año, fue dado por muerto en un ataque también realizado por un «dron» del Ejército estadounidense en Waziristán del Norte.
Precisamente después del ataque, un portavoz de los Tehrik e Taliban (la organización que agrupa a los grupos milicianos paquistaníes que colaboran con los talibán afganos) había desmentido su muerte.
Comentar post