El llamado “Margen Protector” en la Franja de Gaza, por el cual el ejército israelí no deja de bombardear a palestinos, sigue causando víctimas. De momento son 81 los muertos, además de unas 567 personas heridas, 20 de ellas en estado crítico; según el Ministerio de Sanidad de la Franja.
Un último golpe, por el cual tres jóvenes perdieron la vida, se suma a los más de 108 ataques aéreos israelíes lanzados en la tercera jornada de su tercera ofensiva contra Hamás desde que el movimiento islamista tomó el control sobre el enclave en junio de 2007.
En una reunión con el comité de asuntos externos y defensa del Congreso, el primer ministro de Israel, Benjamín Neranyahu, indicó que un eventual cese al fuego no está en agenda. La ofensiva inició tras el secuestro de tres jóvenes israelíes el mes pasado en Cisjordania, los cuales aparecieron muertos posteriormente. Este ataque sería una venganza, aunque lo oficial es que se pretende detener misiles palestinos.
Según fuentes médicas, un 70 por ciento de los 81 fallecidos son civiles, incluidas las siete personas -cuatro mujeres y tres niños- que murieron de madrugada al ser bombardeadas unas viviendas de Jan Yunes, al sur.
En concreto, dos terceras partes son mujeres y niños que han sido alcanzados por ataques israelíes sobre infraestructuras civiles, denunciaron testigos y organizaciones israelíes como Betselem, que recordó hoy que bombardear las viviendas familiares de los milicianos palestinos «viola el derecho internacional humanitario».
Comentar post