Hay conversaciones entre YPF, el Gobierno nacional y las provincias petroleras. El precio del crudo cayó en el mundo, pero acá se mantuvo.
En una mesa de tres patas, el Gobierno nacional, las provincias petroleras y la empresa YPF están negociando la posibilidad de reducir el precio de los combustibles.
El telón de fondo es la caída del precio de petróleo en el mundo, que no se ha sentido en Argentina, ya que aquí se acordó mantener el valor del barril en 83 dólares, cuando en el mercado internacional perforó los 60 dólares.
Según publica hoy El Cronista, las presiones habrían nacido en el Ministerio de Economía que conduce Axel Kicillof. Pero la petrolera bajo control estatal preferiría reducir la carga impositiva para no afectar inversiones.
De ser así, serían los estados nacional y provinciales los que deberían absorber el costo de una rebaja en los surtidores. Fuentes allegadas a las negociaciones indicaron que «se está estudiando un esquema complejo».
De ocurrido, dejaron trascender que el resto de las expendedoras debería acoplarse a la baja del precio que eventualmente encabece YPF.
En el gabinete de Kicillof razonan que una reducción en los valores de los combustibles ayudaría a dinamizar el consumo y debería repercutir en una moderación de precios de toda la actividad.
Según la agencia Bloomberg, si avanza el esquema de beneficios impositivos que propone YPF, eso podría traducirse en una rebaja del siete por ciento en el valor de las naftas.
Fuente: La Voz
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