Un día después de sufrir un cacerolazo, el Gobierno hizo una presentación en la Justicia contra los manifestantes.
Un día después del cacerolazo frente a la casa de Guillermo Moreno, el Gobierno denunció ayer ante la Justicia Federal que el secretario de Comercio Interior fue víctima de «amenazas de muerte con tono mafioso» por parte de un grupo organizado de personas.
El Ministerio de Justicia y Derechos Humanos hizo la denuncia, en la que sostuvo que, a través de las redes sociales en Internet, se difundió un afiche digital que incluye la figura de Moreno en un féretro, con una herida de bala en la frente.
Durante el pedido a la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional Federal, el ministro Julio Alak precisó que los hechos denunciados configuran los delitos de «amenazas, incitación a la violencia e intimidación contra un funcionario público agravada», tipificados en los artículos 149 bis, 212, 237 y 238 del Código Penal.
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