El macrismo asegura que tendrá los votos cordobeses de octubre. En medio de la pelea por el bastión electoral que es esta provincia, en el PRO sostienen que los sufragios de De la Sota irán para Macri. En tanto, ya ubican a Juez en la vereda rival.
El electorado cordobés se convirtió en el gran bastión de cara a los comicios de octubre; y así quedó confirmado con cada declaración de los distintos protagonistas desde las primeras horas del lunes.
Sin el gobernador José Manuel de la Sota en carrera para las generales, desde los entornos de Daniel Scioli, Mauricio Macri y Sergio Massa, buscan capitalizar la buena elección que realizó el mandatario provincial. Y en esta discusión, claro está, todos se adjudican el caudal electoral cordobés, segundo distrito a nivel nacional.
En números, la provincia contó durante las Paso con casi 2,8 M de personas habilitadas para sufragar, de las cuales poco más de 632 mil optaron por la boleta de De la Sota el domingo pasado y lo convirtieron en el más elegido.
Seguido por Macri (564 mil), Scioli (280 mil) y Massa (108 mil). De esta manera, “Córdoba se convirtió ahora en Tierra Prometida”, según graficó un operador local de uno de los candidatos con base en Buenos Aires.
Los planes de Macri
Detrás de las declaraciones del oficialismo nacional, en las filas del espacio amarillo se apuraron en sostener ayer en Córdoba que “el voto de De la Sota se va a inclinar por Macri en octubre”.
La lectura la hacen tras ubicar al gobernador en lo que sucedió durante los últimos años y su rol de opositor a la conducción de Casa Rosada. Además de reconocer que está en el ala derecha del peronismo.
Sin embargo, y a pesar que este análisis lo coloca en la misma vereda que su rival de UNA, el macrismo está confiado y apuesta a la polarización en octubre.
Un referente de Macri en Córdoba afirmó: “Son 39 o 40 puntos que van a ir al PRO. Es cierto que el voto de De la Sota es muy plural, pero en octubre se va a terminar inclinando por nosotros”.
Contrariando así las declaraciones del jefe de Gabinete nacional, Aníbal Fernández (ver página 3) y la esperanza del massismo, que se apoya en las declaraciones que hacen en público los funcionarios delasotistas.
Al mismo tiempo, en Buenos Aires también son varios los que desde distintos sectores ya empezaron a hablar de “diálogo”. Sin embargo, en lo que respecta al PRO, afirman que Macri tiene buena relación con Juan Schiaretti -el gobernador electo viene diciendo que habla con los tres-, pero que no hubo un llamado en las últimas horas.
Por otra parte, y dentro de las teorías que se elucubran en Buenos Aires tras las Paso, ayer hubo una hipótesis que arrojaron algunos analistas en canales de televisión porteños: De la Sota siendo una especie de garante o vínculo para acercar posiciones entre Macri y Massa en un gran armado opositor. Sin embargo en Córdoba le bajan la cotización a esa observación.
Los que responden a la mesa chica del PRO, sostienen que no necesitan del caudillo cordobés jugando en ese rol: “Emilio Monzó -integrante del Gabinete macrista, además de operador y armador de la estructura cordobesa- es amigo de Massa desde los 15 años. No necesitaríamos apelar a De la Sota para llegar a un acuerdo”, señala un miembro de la cúpula macrista.
La situación con Juez
Macri es uno de los presidenciables que más vino a Córdoba a lo largo del 2015. Con aceptación en la clase media como así también en sectores que son acérrimos opositores al Gobierno nacional, la figura del líder del PRO tuvo cierta aceptación que no se terminó de concretar el domingo pasado, a pesar de que varios macristas en la previa aseguraban un triunfo cordobés.
Los cimbronazos en las últimas semanas entre radicales y juecistas, socios locales del macrismo, terminaron limando los números que tenían en la previa; motivo por el cual en el espacio amarillo prefieren dar vuelta rápido esta página.
La libertad de acción de Juez, rival del radicalismo y el PRO en la elección capitalina, quedó consumada tras la renuncia oficial del líder del Frente Cívico. Por lo tanto, el macrismo ya lo ubica en la vereda opuesta y parece que así será más allá del 13 de setiembre, fecha para elegir la nueva conducción al Palacio 6 de Julio.
Por lo que anoche ya un operador cordobés de Macri empezó a ubicar a Juez en ese terreno. Están convencidos que el aporte del Frente Cívico no fue el esperado y así lo graficó: “Empezaron prometiendo cuatro mil fiscales en toda Córdoba, pero para la provincial aportaron 286 y en las Paso 120. Terminamos aportando más estructura nosotros que somos una fuerza más joven que ellos”, concluyeron desde el PRO.
Fuente: La Mañana
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