La identidad de género adoptada por travestis, transexuales y transgéneros deberá ser respetada por las fuerzas policiales y de seguridad federales.
De acuerdo con la Resolución Nº 1181/2011 y con el fin de respetar el «derecho a ser quien se es», Garré instruyó a los jefes de la Policía Federal, Gendarmería Nacional (policía de frontera), Prefectura Naval (policía guardacostas) y Policía de Seguridad Aeroportuaria «a dar un trato acorde a la identidad autopercibida a las personas que así lo soliciten».
Así, cuando un/a integrante de las Fuerzas desee realizar la adecuación registral del género, sólo deberá solicitarlo al Centro Integral de Género de la institución que forma parte, sin requerimiento de ningún tipo de cirugía de reasignación sexual, ni tratamiento hormonal.
A partir de entonces, se tendrán en cuenta su vestimenta y uniforme, la utilización de las instalaciones acorde a la sexualidad adoptada (baños, vestuarios), la asignación de tareas acorde a su identidad, etc.
En cuanto al trato hacia los ciudadanos, la ministra ordenó a las Fuerzas respetar el género y nombre de pila adoptados por los mismos.
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