Tecnópolis: es dueña de una empresa millonaria, pero vive en una villa la historia de la joven de 22 años de Lomas de Zamora, que aparece como gerente de la firma «fantasma» que recibió más de $13 millones por el stand de Vivienda
¿Yo? ¿Dueña de una empresa que ganó millones de pesos? Ni siquiera vi mil pesos, señora. En mi vida.
-Así figura en los registros, señorita. ¿Usted le dio sus datos a alguien?
-Me prometieron trabajo y me dieron $400 pesos. Pero yo sólo quería el trabajo. ¿Qué me va a pasar a mí, señora?
«Georgina» se angustia, pero trata de comprender cómo sucedió. Tiene 22 años y es madre de tres chiquitos. Los cuida, como puede, en una casa de techo de chapa del barrio Facundo Quiroga, en Lomas de Zamora. Ni ella ni su pareja tienen trabajo.
No entiende cómo llegó a figurar en los registros oficiales como la gerente de SAI SRL, una empresa que en 2012 se adjudicó más de $13 millones de pesos para hacer un stand en la feria Tecnópolis. La firma pertenecía a Adriana Cristina Lombardía. Recién al escuchar ese nombre, Georgina comienza a atar cabos.
«Usted tiene que creerme, yo la invito a que venga a mi casa a ver, yo no soy dueña de ninguna empresa», insiste en diálogo con LA NACION.
SU CASA
La contratación a SAI SRL en el Boletín Oficial. Foto: Boletín Oficial
A cinco cuadras de Camino Negro, su hogar no permite dudar. En su barrio, el asfalto deja lugar a las calles de tierra. Tras hacer sonar el timbre que pende de un cable, se abre una puerta de madera que deja ver un largo pasillo, donde conviven al menos tres familias.
Georgina acepta contar la historia bajo la reserva de su identidad. Tampoco permite fotos, ni de ella, ni del lugar.
Lombardía es la persona «conocida» de Georgina. Junto a su socia, Berta Graciela Farías eran las gerentes de SAI Servicio Asesoramiento Iluminación SRL, cuando la firma se adjudicó más de $13.450.922 para el stand de Vivienda en Tecnópolis, según consta en el Boletín Oficial de agosto de 2012.
Lombardía hizo una sospechosa maniobra hace poco más de un mes, y cedió la parte de su empresa a Georgina. Esta joven no tiene cuenta de mail, y pocas veces atiende el celular. No lee los diarios, y mucho menos el Boletín Oficial, donde figuran los movimientos societarios.
Según figura en los registros, Lombardía cedió sus cuotas de la firma SAI SRL a Georgina, el último 30 de abril.
$400 Y TRABAJO
«Una vecina me llevó con Lombardía porque me iba a conseguir un trabajo. Me encontré con ella algunas veces, cerca del Obelisco. Me daba $400 pesos cada vez. Y me prometía trabajo. Yo lo único que quería era trabajar, señora, porque tengo tres hijos, mi marido está enfermo, y con la Asignación Universal [por Hijo] no me alcanza», explica Georgina en diálogo con este medio. Los chiquitos tienen seis, tres y un año.
La pareja de Georgina, Juan, se indigna con la situación e interrumpe su relato. «Cada vez que iba a encontrarse con esa mujer, yo tenía miedo de que no volviera», dice. El hombre tiene tuberculosis y sufrió un accidente de moto, meses atrás.
UNA CADENA DE IRREGULARIDADES
La transferencia societaria a esta joven de Lomas de Zamora es sólo una de las irregularidades que sumó la contratación para el montaje en Tecnópolis del pabellón del Vivienda, que depende del ministerio de Planificación, encabezado por Julio De Vido.
SAI Servicio Asesoramiento Iluminación SRL, la empresa que recibió millones en fondos públicos, no tenía un domicilio real: sus socias habían reinscripto la dirección de la firma en la calle «Maipú 43 8º 83 de Capital Federal». Pero en el microcentro porteño no hay ningún edificio u oficina que coincidan con esa calle y altura. La sociedad tampoco contaba con una página web, ni respondió a los llamados de LA NACION.
El stand de la subsecretaría de Vivienda en Tecnópolis, cosechó sospechas, tanto en su edición 2011, como en 2012.
Foto: www.multideassrl.com.ar
El primer año, una pareja de funcionarios de Planificación había firmado con la Universidad de San Martín (Unsam) un convenio por un presupuesto de más de 13 millones de pesos para montar el primer stand. Del otro lado del mostrador, esos mismos empleados públicos obtuvieron -como privados- una parte de ese dinero con su propia empresa de eventos, Multideas SRL.
Se trata de Ariel Santamaría, asesor del secretario de Obras Públicas, José Francisco López, y de su cónyuge, Claudia Risolía, quien era empleada en Vivienda y gerente de Multideas. El monto que se embolsó la pareja de funcionarios sigue en las sombras, dado que ni los organismos oficiales ni la empresa accedieron a brindar esa información.
En 2012, los funcionarios-empresarios conservaron el negocio con Multideas, ya que, según su página web (que fue dada de baja el pasado jueves) informaron: «Volvimos a Tecnópolis. Multideas ha encarado distintas actividades. Las más atractivas fueron los shows, ya que se buscaron propuestas que pudieran ser para todo tipo de públicos».
En la reapertura de 2012, además de contratar a Multideas, para construir la estructura del pabellón de Vivienda se eligió a SAI Servicio Asesoramiento Iluminación SRL, que recibió $ 13.450.922, según el Boletín Oficial.
Esa empresa había sido adquirida un año antes por Adriana Cristina Lombardía y Berta Graciela Farías. Las gerentes reinscribieron a la firma con una dirección apócrifa. Tiempo después, Lombardía cedió su parte como gerente de SAI SRL a Georgina.
SOSPECHAS Y RESPUESTAS OFICIALES
Para montar el stand de Vivienda, la subsecretaría de Vivienda trianguló los fondos a través de convenios con universidades nacionales: en 2011 puso un presupuesto de $ $13.253.523 en manos de la Universidad de San Martín (USAM) y en 2012 repitió el mecanismo con la Universidad de La Matanza (Unlam), con un presupuesto de $15.065.033.
La semana pasada, tras conocer las presuntas irregularidades, la propia Secretaría de Obras Públicas dependiente de Planificación, ordenó que su organismo se presentara ante la Justicia para investigar los hechos y pidió un sumario administrativo interno sobre los funcionarios de su área involucrados en la contratación del stand.
Respecto a la empresa «fantasma», la AFIP canceló el CUIT de SAI SRL «por lo establecido en la regulación N° 3358», según puede observarse en la página oficial del organismo recaudador. De acuerdo a dicha normativa, son dadas de baja las sociedades que «no han efectuado presentaciones de declaraciones juradas o que, habiéndolas presentado, no registran ventas, ingresos, ni empleados en relación de dependencia, declarados».
Fuente: La Nación
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