El Programa propone una suba de 60% en la cosecha para llegar a 160 millones de toneladas en 2020.
La presidente Cristina Fernández presentó anoche el Plan Estratégico Agroalimentario (PEA), a través del cual el Gobierno apunta a producir 160 millones de toneladas de granos para 2020, con exportaciones del sector agropecuario por un total de US$ 100.000 millones. Como para subrayar la ambición de la iniciativa, la Presidente aseguró que para 2020 la Argentina «va a estar más allá de los 160 millones de toneladas». Entre las metas anunciadas, Fernández dijo que para 2020 se llegará a una superficie sembrada de 42 millones de hectáreas (hoy, en 34 millones) y que las exportaciones de carne vacuna l legarán a US$ 7.000 millones, contra el nivel actual de casi US$ 2.000 millones.
Con tono sereno y predispuesta a hacer bromas, Fernández se cuidó de hacer alusión alguna a los grandes ausentes de la cena: los cuatro intregrantes de la Mesa de Enlace agropecuaria, que encabezaron la protesta de 2008 contra la Resolución 125 y que ayer no asistieron, según aseguraron, por no haber sido consultados en la elaboración de este programa. La forma a la que apeló la Presidente para minimizar su ausencia fue una prolija enumeración de los que sí participaron en el programa: «Intervinieron las 23 provincias, 53 universidades y, 470 establecimientos agrotécnicos. Hasta un perro tenemos», remató, jocosa, mientras un perro que se había colado pasaba a la carrera frente al escenario.
La aplaudieron de pie unos 1.500 asistentes, entre ellos varios de los empresarios más importantes del sector agropecuario, La representatividad de los productores quedó en manos de Carlos Trevisi, de la oficialista Agricultores Federados Argentinos, quien entregó a la Presidente un petitorio para que el PEA sea enviado al Congreso.
Durante casi una hora, la Presidente enumeró con tono de campaña los logros del sector agropecuario a lo largo de la última década. Realzó la importancia de la tecnología impulsada desde dos organismos del Estado, el SENASA y el INTA. «Lo que han hecho nuestros productores más la ciencia y la tecnología más los industriales es la clave de este Programa Estratégico Agroalimentario. Pero esta interacción es también la clave de la Argentina», dijo en tren de conquistar votos del campo para la elección de octubre. También le pidió al Congreso que trate la Ley de Tierras, el «recurso estratégico más importante que tenemos».
El escenario de la presentación fue, como cuatro días antes, la exposición Tecnópolis, en Villa Martelli. Esta vez el público era de extracción agropecuaria, como el titular de Cargill, Hugo Krajnc, y los representantes de las asociaciones de frigoríficos. Pero también se vieron varias de las caras que el jueves habían estado durante la cena del Día de la Industria, como Cristiano Rattazzi (Fiat), Hugo Sigman (Insud), Daniel Herrero (Toyota), Federico Nicholson (Ledesma) y Daniel Funes de Rioja (Copal).
En el escenario, además de la Presidente y Trevisi, se sentaron los ministros Julián Domínguez, Aníbal Fernández y Amado Boudou, el gobernador Daniel Scioli y el decano de la facultad de Veterinaria, Sergio Míguez. El resto del Gabinete se ubicó abajo, junto a una decena de gobernadores. Párrafo aparte fue la ausencia del mandatario chaqueño, Jorge Capitanich. «¿Está allí el gobernador de Chaco?», preguntó Cristina.
Al retirarse, igual que el jueves, sonó bien alto la música de «Dar es dar», de Fito Páez. Rattazzi, que además de accionista de Fiat es uno de los principales productores de papa del país, recordó jocoso que el jueves había chicaneado al ministro de Trabajo, Carlos Tomada, por la música elegida. Ese día estaba Hugo Biolcati, el titular de la Rural. «Le dije a Tomada que estaban los dos sectores representados, el de ellos con Fito y el de los otros, con Biolcati. Pero Tomada no tiene sentido del humor, se limitó a decirme que Fito Páez no es de ellos. Boudou, en cambio, se mataba de risa», contó Rattazzi.
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