La fábrica cordobesa de camiones estará sin actividad hasta el lunes. En el Gran Buenos Aires, la marca francesa canceló un turno y paralizó a mil operarios por tiempo indeterminado. La UCR pide que la ministra de Industria, Débora Giorgi, concurra a Diputados.
La debilidad del mercado automotor amplió ayer su impacto sobre el empleo. Mientras en Córdoba la fábrica de camiones Iveco dispuso volver a suspender a sus operarios hasta el lunes –luego de haber retomado la actividad durante apenas dos días–, en el Gran Buenos Aires Peugeot anunció suspensiones “por tiempo indeterminado” para mil operarios.
En el caso de Iveco, una fuente de la empresa del Grupo Fiat dijo que desde hoy y hasta el lunes próximo se suspenderá a unos 480 empleados, el 80 por ciento de sus 600 trabajadores de la planta de Ferreyra.
Por su parte, un vocero del Smata dijo que las suspensiones comenzarán hoy y se extenderán hasta el miércoles de la semana próxima inclusive. Según Iveco, la paralización de los tres días de la semana próxima no está definida todavía. La empresa sólo confirmó las suspensiones hasta el lunes.
Durante todos los días de suspensión se les abonará a los operarios el 75 por ciento de los salarios de esas jornadas.
Según el Smata, en lo que resta de la primera quincena sólo se trabajará cuatro días.
Iveco tuvo en abril una caída en las ventas de casi el 40 por ciento, entre los tres modelos de la marca italiana. Fuentes de la empresa dijeron que hay un sobre stock equivalente a un mes y medio de producción, lo que representa 750 unidades. Durante abril, la fábrica que vende en el mercado interno comercializó sólo 236 unidades.
La autopartista Montich, que destina el 65 por ciento de su producción a Iveco, también está definiendo un plan de reducción de la producción que incluiría suspensiones para parte de sus 490 operarios.
En tanto, en su planta de El Palomar, Peugeot-Citroën suprimió un turno de trabajo, lo que según la empresa determinó la suspensión por tiempo indeterminado de mil operarios (según el gremio UOM serán 1.100), que cobrarán el 65 por ciento de su sueldo. El gremialista Juan Belén dijo que planea una reunión para “dentro de 15 a 20 días con la empresa para ver si se puede levantar la medida y retomar la producción”.
La firma argumentó que se tomó la medida, que analizaba desde enero, “para adecuar el stock de producción por la caída de ventas de los cuatro primeros meses” de 2014.
En abril, las ventas totales de vehículos se hundieron 35,5 por ciento, dejando a las terminales con excesos de stock.
Por eso, el parate afecta a todo el sector. De hecho, ayer en Alvear, la ciudad del Gran Rosario donde se encuentra el otro centro de producción de autos del país, trabajadores de General Motors también calificaron como “crítica” la situación.
El mercado está afectado por la pérdida de poder adquisitivo tras la devaluación y por las prohibitivas tasas de interés, que se dispararon, inducidas por el Banco Central. Ayer las tasas a las que el Central toma dinero de los bancos se redujeron en un punto, y quedaron en alrededor de 27 por ciento.
El presidente del bloque radical en el Congreso, Mario Negri, presentó un proyecto para convocar a la ministra de Industria, Débora Giorgi, a raíz de la crisis que atraviesa el sector automotor.
Fuente: La Voz
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