Alejandra Vigo explica cómo funcionará el programa Salas Cunas y anticipa los cambios en el PPP y el fin del Confiamos en Vos. Duras críticas a Mestre.
Apuesta a aglutinar bajo el programa “Salas cunas” la estructura de ONG que fueron creciendo al sol de la pobreza en los barrios críticos de la ciudad de Córdoba, y sumarla a la red de dispensarios que la Municipalidad de Córdoba: “Si me preguntás si podré trabajar con (Ramón) Mestre, te respondo que no lo sé”, se ataja, crítica del intendente capitalino a quien le reprochará la falta de gestión.
Es Alejandra Vigo, esposa del gobernador Juan Schiaretti, militante del peronismo y la secretaria de Equidad y Formación de Empleo de la Provincia. Ella tiene un número en la cabeza: 174. Son los barrios conforman en Capital el territorio duro de la pobreza, allí donde las salas cunas comenzarán a nacer este año, hasta llegar a 200 antes de enero próximo.
Desde ese múltiple rol explicará a Día a Día los alcances de la política social que desplegará en los barrios pobres y advertirá que “Juan no tiene impedimentos ni rivales” para soñar por primera vez en su vida con una reelección, aunque falten tres largos años para ese momento.
-¿Cuál será el esquema y la organización para realizar las 1.200 salas cunas que prometió?
-Primero, una co-gestion con las ONG. Si tenemos que ir a cada barrio a armar una estructura, no arrancamos más. Entonces, con cada ONG que tenga una experiencia en el cuidado de los niños, vamos a firmar un convenio para transferirles fondos para recursos humanos, que serán las auxiliares, por lo general mujeres de ese mismo sector, y para la compra de los alimentos. A cada mamá se le entregará leche ferrosa si está embarazada, fortificada para el bebé y leche para la casa, para los otros hermanitos.
-¿Las salas cunas serán sólo para madres que trabajan?
– No. Nuestra idea es que a esas mujeres que dejan a los bebés en las salas cunas vuelvan a la escuela, generalmente en el caso de las adolescentes; y para las no adolescentes estarán los talleres de capacitación con articulación con el programa Por Mi o con un crédito social de emprendimiento.
-El Por Mi, enfocado en madres pobres, incluye una práctica laboral. ¿Perderán la Asignación Universal Por Hijo (AUH)?
-Serán 20 horas de prácticas laborales por semana: el Estado va a pagar una parte del sueldo, aproximadamente la mitad del Salario Mínimo, Vital y Móvil (unos 3.000 pesos) y esperamos que los empresarios aumenten la cifra. Por ser una práctica laboral, no pierden la AUH. No queremos que pierdan la AUH porque es control de niño, escolarización… y la práctica laboral tiene un fuerte componente de la cultura del trabajo, y en eso Córdoba (desde cuando Juan era ministro de DLS) va a la vanguardia: acá se promueve el empleo, no al desempleo.
-¿Qué plazo demandará poner en marcha las salas cunas?
-Este año, en la ciudad, serán 200 salas; en el interior creemos que irá un poco más rápido. Pero Capital es la madre de las batallas: aquí la pobreza es distinta, con problemáticas complejas derivadas de la pobreza de los grandes centros urbanos. Necesitamos que esté la Municipalidad para ver la cloaca desbordada, el agua servida, el basural, las calles por la que no entra ni el colectivo.
-¿Cómo será la coordinación con la Municipalidad de Córdoba?
-Para nosotros es central que cada sala cuna (o grupo) esté en red con esos dispensarios municipales, con esos médicos comunitarios. La Municipalidad tiene las herramientas que necesitamos. Pero no sé cómo me irá con el intendente Mestre. Vamos a trabajar con el Estado municipal, pero vamos a apoyar (con fondos) a las organizaciones sociales.
-¿No se terceriza la asistencia social en organizaciones sociales y políticas?
-No. La prioridad serán las ONG que están trabajando en los territorios: las ONG que puedan empezar mañana a trabajar. Con las organizaciones sociales/políticas, podemos trabajar fundamentalmente con la inserción del empleo, porque eso es lo que ellos le demandan al Estado: becas de empleo.
Pero, ¿quién controlará a las organizaciones sociales/políticas?
-Todo será por beneficiario. Porque muchas veces las becas sirven para sostener a las organizaciones, y no tanto para el beneficiario. Hay que dejar de dale a las organizaciones becas a ciegas, pero necesitamos trabajar con las organizaciones sociales y políticas: ellas tienen inserción en los barrios populares. A diferencia de otros lugares, acá las organizaciones no suplantaron al Estado. Estamos volviendo a los territorios donde décadas pasadas estas organizaciones suplantaron al Estado cuando éste se retiró, y ese es el sentido político. Después esas organizaciones no fueron apuntaladas y quedaron ahí haciendo lo que podían. Y ahora tenemos que volver al Estado.
-Durante el kirchnerismo, esas organizaciones políticas recibieron miles de recursos…
-¿Y cuál fue el resultado? ¿Qué cambio de produjo? Nada. Nada. Se hicieron programas para esas agrupaciones y no esas agrupaciones gestionando programas. Los resultados están a la vista: la AUH que es la política más universal de todas funcionó porque no pasó por esas agrupaciones.
-¿Cuáles son las zonas críticas en las que se centrarán las salas cunas?
-Hay 174 barrios prioritarios, sectores que devienen del mapa de seguridad ciudadana. Zonas que de acuerdo al grado de delictualidad de su población. Tenemos que tener en esos barrios centros de terminalidad educativa: las chicas y los muchachos tienen que terminar el secundario. El programa abarca un anillo un poquito más amplio, sectores que están cerca de las zonas rojas, barrios no marginales, pero sí de marginados. Las 1.200 salitas cunas proyectadas sería el núcleo duro de la pobreza; con 1.500 abarcaríamos una clase baja. Aspiramos a asistir a 75 mil niños.
-¿El programa Confiamos en Vos será renovado?
-Se termina, no se va a renovar. Lo reemplazaremos por la capacitación laboral, pero enfocada en los chicos de barrios donde tenemos prioridad social.
-¿Por qué fracasó? ¿Se superpuso con el Progresar (de la Nación)?
-No diría que fracasó… Sí estamos chequeando qué hicieron los chicos beneficiarios de la beca: no hicieron actividades concretas, no se le demandó actividades a los chicos, entonces no hubo círculo virtuoso. Todos los programas para jóvenes deben ser articulados con Educación: los chicos deben estar en la escuela, no trabajando a los 15. Un trabajo a los 15 es un desempleo a los 18.
-¿Y con qué programa asistirán a esa población?
-Los programas de capacitación y formación serán para este sector específico, por eso se realizaran en cada barrio de los considerados críticos. En este punto reside la importancia de la alianza Estado-ONG-actores sociales de los territorios, como por ejemplo el cura Mariano Oberlin.
-El PPP seguirá, según se anunció. ¿Cambiará su ejecución?
-El PPP dará un salto al articular con la Ley del Aprendiz: el PPP será una práctica y la Ley del Aprendiz ya el ingreso formal al mundo laboral. Y habrá cambios en la gestión: militaremos en cada uno de los barrios que los chicos accedan al PPP, que ya cuenta con fondos nacionales (un tercio) desde julio próximo.
“Mestre no es chicha ni limonada”. Alejandra Vigo.
-¿Qué pasará en la interna del PJ en abril?
-En Córdoba siempre se trabajó estructuradamente, así que creemos que habrá una conducción de unidad, en la que estén todos los matices.
-¿Hay lugar para los kirchneristas después de una disputa tan fuerte?
-En la gestión, la pelea con la Nación fue más fuerte con Schiaretti que con De la Sota. No te olvides que Juan llegó a la Corte Suprema de la Nación. Todo indica que habrá lugar para todos. Hay un espíritu de contener. Muchas de las políticas con Juan son respetadas por el kirchnerismo, pero queremos que ver si el k se allana a una estructura general.
-¿El plan de gobierno es a ocho años, pensando en una reelección?
-Te tiene que ir muy bien para pensar en una reelección, eso se verá. El único que está en condiciones, el que tiene peso político es él, pero depende de cómo nos vaya en esta gestión. En esta no podemos fallar: llevamos 20 años en la gestión y sabemos que habrá apoyo del Gobierno nacional. Juan no tiene limitantes para ser reelecto, pero no lo puedo decir ahora.
-¿El PJ no gana Capital por el pecado original de haber puesto a Kammerath?
-Creo que viene de más atrás. Córdoba fue la ciudad más devastada en la dictadura. Menéndez hizo estragos. Quedaron muy pocos dirigentes y sociedad quedó resentida en su composición social. Y el peronismo no se pudo recuperar. Si el candidato, a lo mejor, en lugar de Kammerath hubiese sido Juan Schiaretti, por ahí todavía gobernaríamos la ciudad.
“Schiaretti no tiene limitantes para ir por la re”. Alejandra Vigo.
-¿El principal rival que tendrá Schiaretti será Ramón Mestre?
-Con él hay una decepción. Mestre era la alternativa que buscaba la gente: no era peronista, joven e hijo de un buen intendente. De esos tres requisitos no se hizo uno. Le falta bastante para ser candidato a gobernador. Tiene más apoyo en el interior que acá. Es un híbrido que no representa a los radicales ni a la juventud; no es chicha ni limonada. Y creo que en el primer período de él fue tremenda la corrupción. Es un Mestre sin ser Mestre (padre), sin peso, que pelea un lugar con Mauricio Macri, que no lo tienen, porque Macri llegó al Gobierno con los arios, con los macristas puros, y el radicalismo es una molestia. Aguad tiene un espacio porque es más PRO que otra cosa.
-¿Cómo analiza el fenómeno Tomás Méndez?
-Se desinfló. Hay que agradecer el fenómeno Méndez a Ramón Javier. Este Tomás Méndez en alguna medida fue un fenómeno tipo Luis Juez, un anti algo; pero a diferencia de Juez, Méndez no tiene consistencia: y él tiene un pecado original del respaldo de los Kirchner. Méndez generó con los jóvenes que quieren participar en política pero no a través de la política.
Fuente: Dia a Dia
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