Nayi insistió en esperar dictamen oficial de autopsia. El abogado querellante dijo que está convencido que la muerte del policía no fue «una autodeterminación». «En tres días estarán en las conclusiones preliminares», señaló.
El abogado querellante en la causa Juan Alós, Carlos Nayi,insistió en que la muerte del oficial de la Policía de Córdoba «no fue una autodeterminación».
«En absoluto no está confirmado que se trató de un suicidio», dijo Nayi.
«La palabra la tienen que dar los peritos oficiales, la opinión de los peritos de control es apersurada», consideró el letrado.
Consultado sobre los trascendidos que señalaron que la nueva autopsia al cuerpo de Alós concluyó que se trató de un suicidio, Nayi dijo: «Salió de boca de los peritos de control,no del mío y menos de los oficiales».
«Hay que esperar los resultados de la pericia oficial», dijo Nayi.
«Para ser serios en una cuestión tan delicada , donde hay dos vidas segadas, hay que esperar el dictamen que emitan las conclusiones en tiempo y forma y por escrito», indicó Nayi.
El abogado de la viuda de Alós, insistió en que la etapa de instrucción tras la muerte del oficial, estuvo «plagada de irregularidades».
«La autopsia comenzó a las 10.30 y terminó a las 17 horas», dijo Nayi.
«No se puede hablar de conclusiones, porque las conclusiones preliminares estarán en tres o cuatro días», sostuvo Nayi.
Asimismo indicó: «Una muerte de etiología dudosa es un hecho criminal, es algo armónico, que se debe interpretar junto al resto de la prueba».
Consultado sobre si su perito de parte, el doctor Mario Vignolo, confirmó que el resultado de la autopsia arrojó que se trató de un suicidio, Nayi indicó: » No sólo no lo confirmó sino que no emitió opinión en esa dirección».
La Justicia Federal concretó la nueva autopsia del cadáver del oficial Juan Alós y del cuerpo de la agente Damaris Roldán, pruebas consideradas clave para determinar cómo fallecieron en 2013 y si sus muertes están vinculadas con la investigación por la supuesta complicidad de la Policía provincial con narcotraficantes.
A partir de media mañana de ayer y con estrictas medidas de seguridad, la pericia se desarrolló en el Instituto de Medicina Forense de Córdoba, con la participación de profesionales de dicha institución, de la propia Justicia Federal, así como de los que habían sido propuestos por las partes, en particular por Roxana Luna, viudad de Alós.
De la prueba no participaron, en cambio, los peritos de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, como lo había pedido el fiscal federal Enrique Senestrari, y que sólo habían sido autorizados por el juez federal Ricardo Bustos Fierro a que intervinieran como meros veedores u observadores.
«El juez decidió que los peritos de la Corte vinieran en calidad de meros observadores, con la expresa prohibición de emitir un dictamen. ¿Para qué llamar a alguien si no puede opinar sobre el caso y que no puede tomar ninguna intervención más que mirar? Como era lógico, desde la Corte no les concedieron viáticos a los peritos», se quejó ante la prensa Senestrari.
El fiscal lamentó que no hayan podido venir los peritos de la Corte, porque, según esgrimió, él los había solicitado «con la idea exclusiva de contar con gente que no tuviera ninguna relación con Córdoba y que pudiera actuar de modo independiente».
Fuente: Cadena 3
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