A quince años y medio, del asesinato del joven de 13 años, David Moreno, la Cámara 1ª del Crimen condenó al policía Hugo Canovas, por ser el autor material del homicidio, a doce años y ocho meses de prisión.
En la sentencia, se confirmó la acusación que señalaba que el policía había utilizado cartuchos PG con municiones de plomo para dispersar a la multitud durante una serie de disturbios.
La fiscal Dolores Romero Díaz había solicitado una condena de 16 años de cárcel efectivo, en virtud de la acusación de homicidio agravado por el uso de arma de fuego y por su condición de funcionario público. Mientras que para Adán y Freire había requerido tres años de cárcel en suspenso y la absolución respectívamente.
Aquel 20 de diciembre de 2001 hubo setenta efectivos en los incidentes en el supermercado Minisol de villa 9 de julio, en Argüello, y varios de ellos utilizaron cartuchos denominados PG (Propósitos Generales), que usan postas de plomo. Una de ellas perforó la nuca de Moreno, que a sus trece años de edad había hecho las tres cuadras que separaban el comercio de su casa para ver qué pasaba.
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