El fútbol, tema inesperado en la campaña. De la Sota tomó posición contra la medida que prohíbe hinchas visitantes. Diferenció que en Córdoba sí hay seguridad en los estadios. Pero no tiene facultades para torcer la decisión de AFA.
La polémica abierta por la AFA al disponer que durante las dos primeras fechas de los torneos del fútbol nacional no se permitirá el ingreso de hinchas visitantes, ni los locales que no sean socios de los clubes, le sirvió en bandeja ayer al gobernador José Manuel de la Sota un nuevo eje político en medio de la campaña.
Rápido de reflejos, el gobernador cuestionó por inconducente e injusta la medida y planteó que, también en esta cuestión de la seguridad deportiva, Córdoba sería una suerte de territorio diferenciado del resto del país. Aseguró que en esta provincia se pueden jugar partidos con público visitante, y hasta clásicos, sin problemas.
Ya el martes por la noche, apenas se conoció la decisión de AFA, el candidato a diputado nacional Oscar Aguad (UCR) fue uno de los primeros en fijar posición a través de Twitter. “Fútbol sin visitantes. Los violentos ganaron. Perdemos los hinchas. La prohibición es un maquillaje hasta que la gente y la prensa se olviden”, escribió.
De la Sota retomó el tema, pero apuntando a coincidir con los hinchas cordobeses, al asegurar que en Córdoba no iban a regir las prohibiciones. “El Cosedepro tiene facultades para decidir jugar en Córdoba con hinchada local y visitante. Los violentos afuera. No nos van a dejar sin fiesta”, avanzó.
En rigor, la gestión se limitaría al envío de una nota a AFA pidiendo la revisión de la prohibición, aunque la movida no tendría ningún efecto práctico y al fútbol cordobés lo alcanzarán las generales de la ley.
Tras esa avanzada oficialista, por el momento más ambiciosa que efectiva, las propias autoridades de Liga Cordobesa de Fútbol admitieron que en definitiva primará lo que disponga AFA, que es quien pone a la venta los tickets para los partidos.
De la Sota fundamentó su diferenciación con el resto del país en que el Estadio Mario Kempes permite hacer operativos de seguridad eficientes y que la Policía local los garantiza. También se quejó de que se intente trasladar a Córdoba los problemas que otras jurisdicciones tienen con la violencia.
Esta actitud del gobernador no es nueva. Hace dos semanas, cuando en Capital Federal se suspendió un amistoso San Lorenzo-Boca porque la interna de la barra del club Xeneize se cobró dos vidas, De la Sota salió rápidamente a resaltar que ese mismo día se disputó en Córdoba un Talleres-Belgrano, sin problemas.
“Los que les temen a los barras es porque los usan en la política. En Córdoba no los dejamos entrar al Kempes, vengan de donde vengan”, reforzó ayer.
En esa cita, omitió mencionar que, durante el referido clásico cordobés, el cobro del estacionamiento en el estadio corrió por cuenta de La Fiel, la barra de Talleres. “No estaba al tanto. Tiene que cobrarlo la Agencia Córdoba Deportes y aplicarlo al deporte amateur”, se atajó. Ese partido fue organizado por la Liga Cordobesa de Fútbol, presidida por Emeterio Farías, quien encabeza la Agencia Córdoba Deportes y es cara visible del Gobierno en cuestiones deportivas. Un dato adicional que une fútbol y política: Belgrano debutará como local el próximo miércoles contra Boca, club con el que posee una manifiesta rivalidad deportiva. Eso ocurrirá sólo un día antes de que finalice la campaña electoral.
Antecedentes
Juicio. El 5 de agosto serán juzgados dos policías acusados de matar a balazos a Jorge Castro, un hincha de Talleres, tras un clásico con Belgrano en 2005.
Talleres. El extécnico Gustavo Coleoni fue “apretado” por barras en una práctica por los malos resultados del equipo. Hoy, la barra se financia con el cobro de estacionamientos en el Kempes.
Belgrano. La barra agredió a hinchas celestes de la platea preferencial porque estos habían hostigado a seguidores de Estudiantes.
Instituto. 23 hinchas fueron enviados al penal de Bower por destrozar un bus en el que habían viajado a Corrientes.
Fuente: La Voz
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