El gremio podría decidir hoy un paro.. El Tribunal Superior de Justicia de Córdoba (TSJ) tiene una carta en la manga para destrabar el conflicto con los empleados: ofrecerá mil ascensos en forma inmediata, con la condición de la también pronta normalización del servicio.
El total de empleados del Poder Judicial asciende aproximadamente a 5.500 agentes, sin incluir magistrados ni funcionarios, con lo cual los ascensos ofertados abarcarían al 18 por ciento de la planta. El 69,5 por ciento del personal es técnico administrativo.
El conflicto por reclamos salariales y por la carrera judicial que lleva adelante el gremio que conduce el kirchnerista Federico Cortelletti se profundizó ayer con una protesta simultánea con cortes de calles frente a todas las sedes tribunalicias de Capital e interior.
Los empleados ya están realizando trabajo a código (a reglamento), lo que ya ha generado la preocupación del Colegio de Abogados de Córdoba que inclusive se ofreció para mediar en una mesa de diálogo. Hoy continuarán las asambleas y la conducción del gremio volverá a reunirse y, en caso de que no haya una respuesta a sus reclamos, podría lanzar un paro.
El sindicato reclama un incremento y señala que está afrontando el primer semestre con un aumento de sólo 10 por ciento que dispuso la Corte Suprema de la Nación.
Comparó que para el mismo período, los magistrados, con sueldos muy superiores, tuvieron un aumento del 14 por ciento al cobrar un retroactivo del cuatro por ciento de la ley de equiparación con la Justicia federal. El próximo aumento que dispondrá la Corte será en junio y rondará el 15 por ciento, según voceros judiciales.
Corteletti sostuvo que tras el prolongado conflicto de 2013, el TSJ terminó dictando una acordada “unilateralmente” que estableció un enganche del sueldo de los empleados con los aumentos dispuestos por la Corte Suprema, pero advirtió que quedó abierta “una brecha salarial entre los empleados y los magistrados de 30 por ciento y que nunca se achicó”.
El gremialista pidió una “solución integral” a los reclamos que incluya tanto la carrera judicial como el achicamiento de la brecha salarial. “Solamente con ascensos no se resuelve nada”, señaló el dirigente, y dijo que el 60 por ciento del personal se encuentra dentro de las tres categorías más bajas.
Remarcó que hasta ahora el TSJ no los convocó y señaló que pretenden discutir también un aumento salarial previo al que otorgue la Corte Suprema, con la inclusión, por caso, de un plus en junio.
Según el gremio de los 5.500 empleados, hay dos mil meritorios (categoría más baja) que con título perciben de bolsillo 13 mil pesos, mientras que un escribiente cobra 16 mil pesos.
Fuentes próximas al Tribunal Superior anticiparon que el alto cuerpo cuenta con las partidas presupuestarias para realizar mil ascensos en la planta de personal, que se sumarían a 800 que ya se realizaron con anterioridad. La condición será la inmediata normalización del servicio, que ya comenzó a resentirse con el trabajo a código y las protestas.
No obstante, el alto tribunal no está dispuesto a anticipar un aumento salarial a los empleados por carecer de fondos propios, y allegados a ese cuerpo indicaron que las gestiones realizadas ante el Gobierno fueron negativas ya que la Provincia adujo no contar “con un solo peso más” para destinar a sueldos en el primer semestre.
Otro de los reclamos del gremio es la carrera judicial, demanda que tendría respuesta con los mil ascensos. “Es lo máximo que podemos ofrecer”, aclaró una alta fuente judicial.
En tanto, el titular del Colegio de Abogados de Córdoba, Héctor Echegaray, expresó su preocupación por el conflicto y se ofreció a intervenir en una mesa de diálogo. Sostuvo que, trabajando normalmente, hay sectores de la Justicia provincial como el fuero laboral que tienen una “alta mora” y advirtió que la continuidad del conflicto la “agravará”.
El directivo dijo que hasta ahora “no advierte políticas por parte del TSJ que tiendan a resolver el conflicto”.
Fuente: La Voz
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