Jóvenes discapacitados lanzan campaña sobre el uso de ascensores, los alumnos de un taller de radio quieren concientizar sobre su utilización en los «shoppings». Tienen deficiencia intelectual y producen micros radiales. Dicen que perdieron el miedo a hablar
Eugenia se acerca al micrófono para decir, fuerte y claro: “¿Sabía que se puede jugar al tenis en silla de ruedas?”. Melina y Milton la miran. Asienten. Claudia Beles y Laura Andino estallan en aplausos y felicitaciones. “¡Excelente!”, gritan. Eugenia se ríe, y festeja.
Claudia es profesora de educación de deficientes mentales y coordinadora del taller de radio “Tenemos la palabra”, parte del servicio de tecnologías de la información y comunicación aplicadas a la atención de la discapacidad en Apinep, un centro de atención e investigación neuropsicológica, que funciona en el Cerro de las Rosas, en Córdoba. Laura es fonoaudióloga, terapeuta del lenguaje.
Eugenia Boqué (28), Milton Díaz (21), Melina Rivet (24) y Julia Soneira (21) participan del taller en el que jóvenes con diversas discapacidades intelectuales graban micros radiales que se difunden por radio abierta, en FM Las Rosas 107.3.
El segundo micro salió al aire el jueves, a las 11. Se trata de una campaña de bien público sobre el buen uso de los ascensores en los shoppings . La idea fue de Milton, que se amargó el Día del Amigo cuando tuvo que esperar en su silla de ruedas más de 20 minutos a que se desocupara el ascensor del Nuevo Centro Shopping. “Vino muy enojado el Milton. El ascensor estaba ocupado por gente que podía ir por la escalera”, cuenta Eugenia.
–Milton, ¿por qué crees que ha gente hace eso?
–Porque no sabe.
Todo es aprendizaje. “Les explicamos que la gente no piensa en lo que no ve, en lo que desconoce. Es también una manera de eliminar el resentimiento”, dice Claudia.
Productores de cultura
La idea, explican las terapeutas, es posicionar a las personas con discapacidad como protagonistas activos en la producción de cultura y, a la vez, mejorar la competencia comunicativa de los estudiantes. Salir de los centros terapéuticos al mundo, para mostrar lo que pueden con el potencial que tienen, dejando de lado el déficit, lo que les falta.
Con la tecnología como aliada, Eugenia, Milton, Melina y Julia se lanzaron a la aventura de producir noticias de su interés, relacionadas con la discapacidad. “Circula muy poca información de este tipo en los medios de comunicación. Ellos tienen otra mirada”, remarca Claudia Beles. Además, agrega que “el uso de la tecnología les da una posibilidad más de insertarse socialmente”.
Empezaron produciendo un periódico digital, en una plataforma de la Universidad de La Matanza. Pero pronto pensaron en la radio como una herramienta que los ayudaría a comunicarse más y mejor. El año pasado fueron a conocer Radio Shopping, y se entusiasmaron. Hoy, y después de mucho trabajo, tienen sus propios micros radiales. Las profesoras creen que los alumnos han mejorado de manera notable su expresión y sus habilidades sociales.
“Los chicos empezaron a decirnos que dejaron de tener miedo a hablar”, explica Laura Andino. Ese es un paso enorme. “Estos chicos no opinan; suelen permanecer en un lugar pasivo, llevan cosas impuestas”, añade Beles. Aquí no tienen más remedio que tomar la palabra.
Comenzaron con ejercicios de la voz, cuenta la fonoaudióloga Andino, para luego interpretar qué comprendían de lo que escuchaban. Luego, a la acción.
Primero conocieron y palparon un diario de papel para que la noticia dejara de ser algo abstracto. Después, comenzaron a pensar qué querían decir, buscaron información, la redactaron y la grabaron. Paso a paso.
El primer micro se basó sobre la existencia de un dispositivo con botones de colores para personas con discapacidad motriz o intelectual que funciona como un mouse común y corriente. Milton lo usa. “Se hace en Córdoba”, informa.
El segundo fue la campaña por el buen uso de los ascensores; el tercero, una entrevista a Jean Maggi, que realiza deporte adaptado. Y van por más.
“El taller nos ayuda a hablar, a comunicarnos”, remarca Milton. En eso coinciden todos, aunque disienten sobre qué es lo más fácil. ¿Grabar o buscar la información? Depende, dicen. Milton opina que la radio sirve “para que la gente se entere de cosas, para que sepa”, dice Milton. Y, como si eso fuera poco, también los ayuda a pensar.
Fuente: La Voz del Interior
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