Los alimentos subieron casi 9% en Córdoba y empresas no darán marcha atrás. La canasta que mide el CPCE aumentó 8,9% en diciembre, con variaciones de precios en el interior y acumuló 31,7% en 2015.
Por su parte, las fábricas alimenticias anticiparon que no volverán atrás con las alzas. La devaluación impactó de lleno en el súper. En diciembre la Canasta Alimentaria Nutricional (CAN) que mide el Consejo Profesional de Ciencias Económicas (CPCE) subió 8,89% en relación a noviembre en Córdoba.
La variación interanual fue de 31,75%. Así, para una familia de cuatro miembros (compuesta por un matrimonio y dos hijos menores) el valor fue de $ 7.823,54; mientras que la Canasta Total sumó $ 16.820,62.
En el interior los registros relevados muestran variaciones. En Villa María el aumento fue de 7,28% en relación al mes anterior, con una suba interanual acumulada del 27,47%; en Jesús María, el alza alcanzó el 10,15% intermensual y en el año el incremento fue de 29,15%.
Para Marcos Juárez el alza respecto a noviembre fue de 9,87% y en el año, 31,21%. En Río Cuarto, la suba sumó 10,88% y en el acumulado anual, 34,44%. En San Francisco, la canasta se incrementó 6,99% en un mes y la variación interanual fue del 25,45%.
Nada baja
En tanto, el presidente de la Coordinadora de Industrias de Productos Alimenticios (Copal), Daniel Funes de Rioja, afirmó que no hay ninguna posibilidad de que todos los precios de la economía que aumentaron desde octubre último vuelvan atrás como pretende el Gobierno.
El empresario salió a marcarle la cancha al equipo económico que lidera Alfonso Prat-Gay debido a su intención de incluir una retracción de precios en el Pacto Social tripartito que se convocará a mediados de este mes, con cámaras empresariales y sindicatos.
Funes de Rioja dijo que su sector está de acuerdo con el diálogo, pero aclaró que quiere hablar de ausentismo, costos de logística y una presión fiscal del 40% sobre los alimentos, para que las empresas que puedan funcionar y los trabajadores que preserven su nivel de vida.
Al ser consultado sobre la posibilidad de dar marcha atrás con algunos aumentos, el empresario respondió: “Con carácter general yo no veo ninguna posibilidad de que ello sea así. Ahora, con carácter específico puede haber algunos casos. Pero de ninguna manera, unamedida de carácter general”.
La Copal es una entidad gremial empresaria que representa a cámaras y empresas de la industria de la alimentación y de bebidas, por lo que su poder de fuego para un acuerdo de precios es altísimo dado que existe una afectación directa a todas las clases sociales.
Técnicos de las cámaras empresarias y del Gobierno de Mauricio Macri vienen diseñando desde hace 15 días una nueva lista de precios que sirvan como referencia para la inflación: tendría unos 220 productos.
Según Funes de Rioja, el plan del kirchnerismo no era “Precios Cuidados sino Precios Pisados, dado que -según dijo- en los últimos 10 años hubo una administración de comercio basada en un manejo ni siquiera acordado sino mucho más unilateral por parte del Gobierno”.
Señaló el empresario que en 2015, por ejemplo, en la variada lista de productos del programa oficial Precios Cuidados el reconocimiento del incremento de costos llegó al 12,5%, cuando la inflación general en la economía era claramente muy distinta.
Ahora, hay una instancia de negociación entre las empresas productoras, supermercadistas y gobierno con respecto a la nueva lista de productos de esta canasta básica, que se sabrá en las próximas horas.
Según Funes de Rioja, en la Argentina “hay distorsiones de precios relativos” por lo que el congelamiento en los precios de los alimentos “es otro cepo más que ha tenido la economía”.
Sostuvo el empresario que hay una serie de datos que hacen que la ecuación de costos sea negativa para las empresas porque aumentaron los combustibles, los salarios y la materia prima por el hecho del sinceramiento del tipo de cambio y aclaró que “todo eso influye”.
Fuente: La Mañana
Comentar post