La Corte pide medidas urgentes para combatir las drogas. El máximo tribunal envió al Gobierno nacional y al Consejo de la Magistratura sugerencias realizadas por jueces del norte del país. Berni defendió su gestión.
Buenos Aires. La Corte Suprema de Justicia de la Nación le solicitó ayer al Gobierno nacional y al Consejo de la Magistratura que “arbitren de modo urgente” las sugerencias realizadas por jueces federales del norte del país para luchar contra el narcotráfico.
La resolución de la Corte se sumó, de esta manera, al reciente reclamo del Episcopado argentino, que en un comunicado alertó sobre el crecimiento del narcotráfico en todo el país.
La Corte impulsó las sugerencias realizadas en octubre pasado por jueces federales de Salta, Jujuy y Tucumán, las que hasta ahora, a criterio del alto cuerpo, no fueron atendidas por las autoridades políticas.
Ante esta resolución, el secretario de Seguridad, Sergio Berni, defendió las políticas implementadas por el Gobierno kirchnerista. Berni sostuvo que el combate es “activo, bastante eficiente y frontal”, y garantizó que “las fronteras (del país) están bien cuidadas”.
Tras el comunicado de la Corte Suprema, Berni también reveló que se reunió “en varias oportunidades” con el titular del máximo tribunal, Ricardo Lorenzetti, para “poder intercambiar opiniones para tratar problemas de la Justicia, sobre todo en la Región Norte, en
Salta y Formosa”.
“Estoy muy agradecido con Lorenzetti porque tomó nota rápidamente, nos hemos reunido con la Cámara de Salta, con los jueces del norte, y la Corte empezó a trabajar para generar lo que hoy estamos viendo”, señaló el funcionario.
El reclamo y la repercusión
En su resolución, la Corte menciona la “extrema gravedad de las circunstancias denunciadas”, vinculadas al aumento del tráfico de drogas en esas provincias norteñas.
Esta determinación surgió luego de que la Iglesia difundiera un duro documento en el que advirtió sobre el avance del narcotráfico en el país y expresara preocupación “por la desprotección de las fronteras debido a la demora en dotar de adecuados sistemas de radar a las zonas más vulnerables”.
En este contexto, los diputados nacionales Miguel Bazze (UCR) y Juan Carlos Zabalza (PS), y el intendente del partido bonaerense de San Martín, el massista Gabriel Katopodis, también sumaron sus cuestionamientos hacia las políticas del Gobierno nacional. El propio Mazza escribió ayer en la red social Twitter: “Se vende droga en cualquier esquina. Nuestra frontera es un colador de estupefacientes. Ya no somos un país de tránsito, sino uno productor”.
El diputado radical Bazze señaló: “Berni pretende engañarnos o desconoce la realidad. Es muy grave que afirme que en la Argentina están custodiadas las fronteras cuando, en realidad, la ausencia de controles ha posibilitado el ingreso de enormes cantidades de droga que son procesadas y exportadas desde aquí”.
Por su parte, el socialista Zabalza dijo que a los K “no se les ocurre otra propuesta que responsabilizar políticamente a los gobiernos que no son de su mismo signo político”.
Berni defendió su gestión
Sobre la crítica de la Iglesia, Berni negó que la Argentina sea “un paraíso” narco, y destacó que en lo que va del año detuvieron a “5.700 narcotraficantes”.
El secretario de Seguridad expresó que su gestión está “imponiendo una nueva modalidad” para combatir a las bandas que comercializan drogas, “que es la lucha en la profundidad del territorio, donde es importante la inteligencia criminal”.
“La lucha contra el narcotráfico es muy activa y, además, bastante eficiente. Lo que se tiene que entender es que las investigaciones para desbaratar a estas bandas no llevan menos de un año”, manifestó Berni en diálogo con una radio porteña.
El funcionario nacional planteó la posibilidad de discutir la “despenalización” de la marihuana como se efectuó en Uruguay, y cuestionó además al Gobierno de Santa Fe por la manera de encarar la problemática narco en la ciudad de Rosario.
“El problema de Rosario es un problema típico que no se da en el resto del país, que tiene que ver con la ausencia del Estado dentro del territorio. A partir de ahí se genera una disputa territorial, que nada tiene que ver con lo que significa el desarrollo del narcotráfico”.
Fuente: La Voz
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