Estudiantes marcharon exigiendo una mejor educación pública. Más de 300 jóvenes se autoconvocaron ayer para manifestarse en favor de una mayor inversión en obras de infraestructura escolar y la derogación de las leyes educativas, retomando los reclamos que en 2010 motivaron la toma de más de 30 colegios.
Cientos de jóvenes estudiantes secundarios, universitarios y terciarios de Córdoba marcharon ayer en reclamo por una mejor educación pública por las calles céntricas de la ciudad.
Partieron pasadas las 18 de avenida Colón y La Cañada, desde donde más de 300 jóvenes enarbolaron banderas con los reclamos que en 2010 motivó la toma de más de 30 establecimientos educativos en Córdoba, muchos de ellos sin respuesta hasta el momento.
Muchas agrupaciones sociales y políticas se unieron a los estudiantes en su reclamo, que fue contundente a pesar de que se realizó en plenas vacaciones de invierno.
Joel Rodríguez, integrante del Centro de Estudiantes del Instituto Ingeniero Carlos Cassaffousth, aseguró que la de ayer fue la primera manifestación de los estudiantes, que se tradujo “en el principio de una movida que será más grande, porque todos los estudiantes estamos cansados de no ser escuchados. Más aún los chicos de escuelas de la periferia, a los que se le da menos importancia inclusive”.
Joel admitió que la toma que se extendió un mes en su colegio fue el puntapié para la manifestación realizada ayer. “Fue muy importante lo que hizo el Cassaffousth. Se dio la toma que nunca antes se había hecho, y ocurrió por las reiteradas de mentiras por parte del Gobierno provincial”. Sin embargo, el estudiante recordó que la toma fue suspendida hasta el lunes próximo. “Si el 15 de julio no están las obras que se comprometió a hacer la Provincia, volveremos a la toma. Y será en plenas vacaciones de invierno, para aquellos que decían que tomábamos el colegio para no tener clases”.
Por su parte, Gabriel Domínguez, presidente del Centro de Estudiantes de la Facultad de Filosofía y Humanidades de la UNC, aseguró que la marcha de ayer fue “en defensa de la educación pública, exigiendo las reivindicaciones de los Secundarios para que se cumplan los planes de obras prometidos por el Gobierno provincial en lo que hace reformas edilicias. Queremos un aumento en el presupuesto general de la Educación tanto para los secundarios como los terciarios. En cuanto a los estudiantes universitarios, queremos la derogación de la Ley de Educación Superior que estamos reclamando al Rectorado y al Gobierno Nacional, y que particularmente la carrera de Psicología no acredite ante la Coneau. Más allá de los reclamos propios de cada nivel educativo, estamos aquí mostrando unidad y pedimos que las leyes que de Educación Superior (LES) y la Ley de Educación Provincial (LEP) sean derogadas y hacer una construcción democrática y genuina de los planes de estudio y las leyes de educación para que esté al servicio de todos”.
Dentro de la marcha, se destacaron además los estudiantes del Ipem 157 Anexo de Santa María de Punilla, quienes mantienen clases en contenedores. Según expresaron, desde 2010 se está construyendo la escuela pero las obras “van muy lentas”. Isabela Mercado, del centro de estudiantes de ese Ipem, recordó que las clases se dictan en 10 contenedores para 150 alumnos más docentes, y que si bien la situación se iba a dar por tres meses, ya llevan tres años esperando la finalización de la obra del edificio definitivo.
Fuente: La Mañana
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