12 cuotas sin interés sostienen las ventas y sobreviven y sostienen las ventas. Gracias a ellas, los comercios de electro continúan manteniendo los niveles de venta.
Los planes largos son, en los comercios que venden electrodomésticos, el principal sostén de las ventas. Con los consumidores más cuidadosos a la hora de gastar y los costos operativos en subida, las ventas se habrían desplomado. Sin embargo, gracias a las compras con plástico en cuotas largas, no crecen, pero tampoco caen.
“Las ventas hace tiempo que están estancadas. Varía según el comercio, a lo que más venda cada uno y a la envergadura del negocio, pero, en general, están quietas”, dijo a Día a Día Horacio Gavillón, de la Cámara de Cámara de Comercio de Electrodomésticos y Afines de Córdoba, que encuentra una explicación a este contexto en “los planes largos sin interés que nunca se fueron del todo”.
“El plan de 20 cuotas con Cordobesa se ha ido prorrogando y, por suerte, se mantiene, porque anda muy bien”, detalló el dirigente.
Para Luis Méndez, también directivo de la Cámara y titular de Ama Hogar, “la tendencia es la misma con la que se terminó 2014: un 15 por ciento abajo en unidades vendidas”. “Los planes largos son de gran ayuda. Aunque hay que reconocer que el plan Ahora 12, que traccionaba mucho las ventas, sólo quedó vigente para electrodomésticos los sábados y domingos, con lo que se encarece la financiación el resto de los días”.
Además, están los planes de los bancos privados que siguen presentes con “hasta 18 cuotas sin interés, no de una manera generalizada, pero sí en algunos días, con algunas tarjetas o para comprar determinados productos”, dijo Gavillón.
Que los planes sobrevivan se entiende como vital para las arcas de los negocios, toda vez que las ventas del rubro son entre un 60 y un 70 por ciento con tarjeta. “El resto se reparte entre débito, efectivo, planes de financiación propios del comercio o cheques”, detalló Gavillón.
Pierden rentabilidad
Para los empresarios del sector electro, los planes tienen una “pata” negativa: que es un lastre más a la hora de hablar de rentabilidad. Las tarjetas no son gratuitas, tienen altos costos que los paga el comercio y que llevan al mínimo la rentabilidad. “Suben los costos internos, los insumos, la carga impositiva es altísima, los servicios, la luz, los costos laborales y las ventas están estancadas. La diferencia es rentabilidad que se pierde”, explicó el dirigente.
Se copa américa
Las expectativas para lo que resta del año encuentran dos puntos fuertes: que los gremios empiecen a cerrar las paritarias y que algo de todo eso vaya a consumo; y un clásico: el fútbol. “La Copa América no es el Mundial, lo sabemos, pero si Argentina viene bien y avanza, la gente compra más televisores que en un junio sin fútbol”, dijo Gavillón. Para Méndez, levantarán las ventas entre un 10 y un 20 por ciento en pantallas de TV.
Además, los empresarios cuentan con que los bancos y las tarjetas saquen promociones para esos meses, lo que siempre es bienvenido.
Lo más alentador para lo que viene es que el modelo kirchnerista se basamenta en el consumo, lo que para los comercios, en general, es bueno.
“La tormenta pronosticada cuando vino la devaluación de enero de 2014 no llegó, al menos por ahora parece que no va a llegar. Mientras el gobierno siga inyectando plata para el consumo, las ventas se sostienen, hay que ver qué pasa después”, aventuró Gavillón.
Rubros
Cuatro rubros han sostenido las 12 cuotas sin interés a lo largo del tiempo, casi sin pausa. Son sectores que representan compras que muchas veces se pueden postergar, lo que hace que se intente captar la venta como sea, en este caso, con planes largos.
En la mayoría de las ópticas medianas y grandes ofrecen 12 cuotas sin interés para anteojos, tanto recetados como para el sol.
Otro de los rubros que nunca perdieron las 12 cuotas sin interés. La gente posterga el cambio del colchón y con las cuotas intentan adelantar la decisión. En algunos comercios ofrecen, además, un descuento del 20%.
Puertas, ventanas y cerramientos de chapa y de aluminio también pertenecen a un rubro muy tarjeteable. Los altos valores de los productos hacen necesario que se puedan dividir los montos entre varios meses.
Cambiar las gomas del auto representa hoy no menos de $ 2.700. Por esto, para facilitar el acceso y adelantar el recambio, la mayoría de los comercios del rubro no dejaron nunca de ofrecer los planes largos, sin interés.
Las 12 cuotas en electro y algunos otros rubros puntuales también llegaron a los híper y supermercados.
Fuente: Día a Día
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