Con el 53,7%, Macri arrasó en Córdoba y dejó en lejano segundo lugar al candidato de De la Sota. Massa no logró captar el voto de Unión por Córdoba y obtuvo el 20,2%. El FpV quedó tercero, con 18%. El resultado de Cambiemos en la provincia fue una de las llaves para que el líder del PRO accediera a la segunda vuelta electoral.
Los cordobeses apoyaron en forma abrumadora al candidato presidencial de Cambiemos, Mauricio Macri, quien quedó primero en la provincia, con el 53,7% de los votos, un porcentaje que sólo fue superado en 1983 por Raúl Alfonsín, y que fue una de las llaves para que el líder del PRO accediera a la segunda vuelta electoral. Macri había salido segundo en las primarias de agosto, con el 35,3%, por lo que subió 18,4 puntos en cincuenta días.
Con el 20,24% quedó Sergio Massa, el candidato de José Manuel de la Sota en la alianza UNA. El gobernador de Córdoba no logró transferirle al dirigente de Tigre más que una mínima parte de los 650 mil votos (33%) que había obtenido en las Paso.
Macri le ganó a Massa en departamentos «pobres», de tradicional voto peronista, como Pocho, Minas, Sobremonte y Río Seco, entre otros, lo que provocó suspicacias sobre si el mandatario cordobés realmente trabajó para la lista de UNA, o si Unión por Córdoba pidió el voto para Cambiemos.
En tercer lugar, con el 18,8%, se ubicó el candidato del Frente para la Victoria, Daniel Scioli. El goberandor de Buenos Aires, que viene de obtener 14 puntos en la Paso, no logró los 20 puntos a los que de mínima aspiraba para asegurarse el triunfo en primera vuelta.
El cuarto puesto, con el 3,21% fue para la fórmula Nicolás del Caño-Myriam Bregman, del Frente de Izquierda y los Trabajadores (FIT), en lo que significa una caída de 0,4 puntos respecto de las Paso.
Compromiso Federal, que llevó la candidatura de Adolfo Rodríguez Saa-Liliana Negre de Alonso, obtuvo el 2,16%, lo que también implicó una pérdida sobre los 3 puntos del puntano en las Paso.
En último término se ubicó Margarita Stolbizer, al frente de la lista Progresistas. Sacó apenas el 1,82%, por debajo del 2,33% de agosto.
Con estos porcentajes, Cambiemos se adjudicó las dos bancas en le Senado por la mayoría, y el frente UNA-UPC, la tercera. En cuanto a la cámara baja, el reparto sería el siguiente: cinco escaños para Cambiemos, dos para UNA-UPC y las otras dos para el FpV.
Nuevo escenario
Con el 94% de los votos escrutados al cierre de esta nota, la elección presidencial en Córdoba deja varias lecturas posibles. Por un lado, se ratificó y se profundizó la oposición del cordobés al Frente para la Victoria, y al kirchnerismo en particular.
En ese sentido, no alcanzaron los esfuerzos de «pejotización» y «deskirchnerización» del sciolismo, y el gobernador de Buenos Aires no pudo superar la performance de Eduardo Accastello en las provinciales de julio.
Ayer, cuando las encuestas en boca de urna adelantaban el súper triufo de Macri en la provincia, referentes del FpV con origen en el PJ acusaron a De la Sota de haber sido funcional al macrismo. «No trabajó para Massa sino para Macri: Massa fue la excusa para quitarle votos a Scioli», interpretó un dirigente provincial.
El goberandor saliente perdió en su territorio (aunque siempre podrá decir que él no era candidato) y perdió a nivel nacional, porque su candidato Massa sacó 21 puntos nacionales y quedó afuera del balotaje.
Pero al alambrar la provincia y el PJ cordobés, logró uno de los objetivos que se había propuesto cuando fue evidente que no tenía chances presidenciales: complicarle el paso en Córdoba al FpV.
Desde hoy, cuando comience la campaña para la segunda vuelta del 22 de noviembre, la estrategia del PJ provincial ya no estará en sus manos.
Los intereses políticos del mandatario electo, Juan Schiaretti, comenzarán a tallar. De hecho, él mismo había asegurado que su compromiso con Massa finalizaba en la primera vuelta. Habrá que ver si De la Sota finalmente se corre y deja las decisiones a su sucesor, o si encabeza él mismo la discusión política que necesariamente se abrirá en el PJ cordobés por los apoyos que pedirán los candidatos Scioli y Macri.
Fuente: La Mañana
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