“Con los recursos de la Nación, en 2012 nos fue muy mal” de los aportes nacionales directos, el ministerio sólo recibió 7,4 millones de pesos sobre una pauta de 42 millones, precisó. Tampoco fueron homologadas las emergencias agropecuarias
Néstor Scalerandi se lo observa molesto y preocupado. “El presupuesto que teníamos el año pasado para los aportes directos al Ministerio era de alrededor de 42 millones de pesos y sólo hemos recibido 7,4 millones. Nos fue muy mal; por eso el gobernador decidió que este año hagamos un esfuerzo extra”, explicó el ministro de Agricultura en una entrevista.
El desfasaje será compensado a través de aportes provinciales al ministerio o a la Fundación Banco Provincia de Córdoba para ofrecer microcréditos subsidiados, dirigidos especialmente a pequeños productores.
“También nos fue mal en otras cosas con la Nación. La emergencia agropecuaria no fue homologada, a pesar de que en público se nos había dicho que Córdoba era un ejemplo en su tramitación”, advirtió.
También ubica en la misma situación a los fondos para ganaderos. No obstante, como una responsabilidad no exclusiva de la órbita nacional, Scalerandi consigna que “doña burocracia” impide que en situaciones de emergencia las ayudas lleguen en tiempo y forma. “La ayuda que no llega a tiempo no es ayuda”, sostiene. Por eso propone cambios en los mecanismos para instrumentar la emergencia agropecuaria.
Objetivos y programas. De acuerdo con los objetivos presupuestarios, la cartera para este año tiene proyectadas erogaciones por 112,5 millones de pesos, de los cuales 34,2 millones serán destinados a personal.
En cuanto al origen de los recursos, 62,9 millones provendrán de rentas generales y 49,5 millones de cuentas especiales (31,1 millones corresponden a programas nacionales).
Con destino a subsidios de diverso orden, Agricultura presupuestó un total de 37,4 millones de pesos, de los cuales 21,8 millones están computados a programas nacionales.
Algunos de los programas en los cuales la cartera rural hará foco comprenden la conservación de suelos (con una previsión de cinco millones de pesos); control biológico de malezas (en convenio con la Universidad Católica); operativos de fiscalización (2,4 millones de pesos) y distintas actividades relacionadas con la ganadería (digitalización de marcas y señales, trazabilidad, aumento de la eficiencia reproductiva, aprovechamiento de efluentes de tambo, capacitación, entre otros).
También se contempla el desarrollo forestal territorial (2,1 millones de pesos) y el mejoramiento de la producción porcina con esquemas asociativos (1,3 millón).
“Vamos a reforzar con créditos por más de 15 millones de pesos para pequeños productores”, dijo el ministro.
Buenas prácticas. Durante 2012, el ministerio realizó actividades de capacitación a unos 6.000 operadores y aplicadores de agroquímicos. “Este año continuamos con el sistema, pensamos que vamos a alcanzar a unos ocho mil asistentes. Estamos produciendo un material en CD para distribuir entre estudiantes de colegios secundarios, enfocado en las buenas prácticas agrícolas, en la prevención, en los sistemas de tratamiento y aplicación de agroquímicos, el triple lavado de los bidones”, adelantó.
Según Scalerandi “Córdoba tiene una enorme ventaja con respecto al nivel nacional; tiene la mejor ley de agroquímicos que pueda existir. Ahora, junto con la receta fitosanitaria, el profesional ingeniero agrónomo va a realizar una historia clínica (fitosanitaria) del lote a tratar, que estará georreferenciado. Estamos preparando un esquema para que esta información esté a disposición de los productores, asesores y aplicadores”.
–¿Qué variantes contempla la cartera para hacer más efectivo el régimen de emergencia agropecuaria?
–Se va a analizar para proponer y consensuar con las entidades un esquema más efectivo, una actualización de la ley. Nos dio resultado el año pasado un certificado de daño.
Por su celeridad, casi todas las instituciones lo aceptaron. Nosotros georreferenciamos los lotes afectados; luego vamos, auditamos y controlamos. Y así determinamos el porcentaje de afectación. Podemos estar con un margen de error de siete a 10 por ciento. Este mecanismo fue aceptado por todas las instituciones. También lo hemos hecho este año con la inundación; ese certificado de daño, firmado por los intendentes y nosotros, será llevado a la Comisión –durante la primera quincena de febrero– para incluir dentro de la emergencia a los afectados. Esto nos ayudó mucho porque la Nación nos pide que la emergencia sea planteada con datos bien georreferenciados.
–¿Cuánto está afectada la competitividad del agro provincial por la política económica? Córdoba debió apelar a herramientas como la tasa vial sobre los combustibles.
–La competitividad no está afectada por la tasa vial, porque en el norte del país los precios de los combustibles están inclusive un poco más altos que en Córdoba. La competitividad no está afectada por el costo impositivo provincial, sino por un problema grave, la necesidad de ajustar el tipo de cambio. Un ejemplo es la leche. Muchos políticos, incluso de mi partido, plantean la necesidad de hacer una ley lechera pero, cuando nos ponemos a ver, sus beneficios, sin el factor macroeconómico, es letra muerta. El sector lechero tiene hoy una sola forma de salir adelante, con una fuerte devaluación. Una medida nacional no se puede corregir desde una provincia. En precios de la leche estamos a niveles de 1998/1999; entonces eso hay que corregirlo urgente.
–¿Qué opinión le merecen las objeciones a la radicación de Monsanto en la provincia?
–Desconozco los móviles que hay detrás de cada caso en particular. Me parece bien que la sociedad esté sensibilizada cuando corre algún riesgo la salud. Con respecto a los agroquímicos, hay que ser muy precavidos y coincido con los “verdes” (ambientalistas) en que hay que tomar todas las previsiones. Pero no se gana nada con meter miedo, sin estudiar cada tema. Creo que las empresas de agroquímicos y de biotecnología no están invirtiendo lo suficiente para demostrar y dar tranquilidad a la población respecto de que sus productos no son perjudiciales.
La electricidad, si no se toman prevenciones, mata. Y la energía, con las prevenciones del caso, mueve a toda la sociedad. Con los agroquímicos pasa lo mismo. No existe ninguna sustancia o elemento natural que sea inocuo cuando no se toman las medidas adecuadas para que lo pueda receptar el cuerpo humano. Las empresas deben realizar trabajos científicos, participar activamente con las universidades y centros de investigación. Como experiencia, acá en el ministerio, tengo un ejemplo espectacular: hace unos meses, todos los pueblos de alrededor de la laguna de Mar Chiquita se sintieron afectados por las tormentas de sal. Corrió el pánico, vinieron acá todos los intendentes de la zona.
Tuvimos la suerte de que participaron todos los centros de investigación, las universidades, el Inti, el Conicet, Senasa, Inta. Se hizo un trabajo brillante y llegaron a una conclusión objetiva, que esa tormenta de sal no afectaba seriamente la salud. Creo que Monsanto tiene que trabajar para demostrar que lo suyo, tomando las previsiones, no es para nada perjudicial.
Siembras frenadas. Casi 70 mil hectáreas de maíz y soja quedaron pendientes de sembrar en el norte de Córdoba, debido a la falta de humedad, según un informe elaborado esta semana por el Ministerio de Agricultura de la Provincia.
“Si se dieran precipitaciones para fines de este mes se podrá finalizar la siembra; no obstante, hay productores que están planteando que si no se dan las lluvias hasta el 5 de febrero, esos lotes podrían quedar para siembras de invierno. La falta de pronósticos de lluvia para la zona centro preocupa, dada la condición de los lotes de siembra temprana que hoy necesitan agua”, dice el informe.
Definiciones del ministro
Tarifas de fletes agrícolas. “Los camioneros pretenden una tarifa de referencia, pero que no sea tan rígida, sino que les dé posibilidades de negociación. El ejemplo concreto es que la Nación le puso el año pasado una tarifa altísima y no se cumplió nunca. Lo quisieron hacer a través de la Afip y tampoco funcionó, porque hubo acuerdos de partes. El Consejo Provincial de Cargas Agropecuarias será convocado, pero aunque no se reúna de manera formal, estamos en permanente comunicación con sus integrantes”.
¿Cosecha récord? “Estimamos que este año la provincia va a tener una muy buena cosecha (a pesar de los casos de daños por granizo, inundación o postergación de siembras por falta de agua). Entendemos que vamos a volver a los niveles que estábamos manejando en 2010/11 (24,7 millones de toneladas). No me animo a decir si será un nivel récord, porque ahora dejó de llover en buena parte de la provincia. En el sur algunos maíces de primera, que se sembraron temprano, están sufriendo la falta de agua. Pero creo que va a ser una muy buena cosecha”.
Radicación de Monsanto. “La gente cree que estamos a favor de tal o de cual. Como Estado, tenemos que escuchar y analizar seriamente cada tema. No hay dudas que las inversiones que aportan biotecnología, con todos los resguardos técnicos y ambientales, son positivas, muy buenas. No podemos estar en la época de 1950 cuando se trabajaba con arado tirado por caballos y semillas de baja productividad. El mundo requiere comida. En el caso que nos ocupa, se producirán semillas para la Argentina y el mundo, y no materia prima solamente”.
Proyecto sobre control biológico de plagas. “El año pasado presupuestamos 200 mil dólares (alrededor de un millón de pesos) en un proyecto sobre control biológico de plagas y este año vamos a hacer lo mismo. Estamos hablando de dos millones y pico de pesos. Es un trabajo de investigación y desarrollo en convenio con la Universidad Católica. También participa el Ministerio de Ciencia y Tecnología”.
Fuente: La Voz
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