Cinco integrantes de la familia de David Nalbandian protagonizaron un accidente automovilístico en la ruta 9, a la altura de la localidad de Zárate, sin mayores consecuencias físicas.
Alda, la madre del tenista, conducía el automóvil, un Volkswagen Bora, que también transportaba a su padre -el abuelo de David-, dos hermanas, tías del jugador, y una cuñada, cuando pisó un charco, se despistó y el vehículo dio un vuelco.
Los ocupantes del automóvil fueron trasladados de inmediato a un sanatorio de Zárate, donde quedaron internados en observación, aunque Javier y Darío, los hermanos de Nalbandian, estaban en viaje hacia esa localidad para acompañar a sus familiares. En el momento del accidente, el tenista estaba en vuelo de Buenos Aires a Córdoba y se preocupó al arribar a la capital cordobesa y enterarse de lo sucedido, pero inmediatamente se le informó de la levedad del hecho. «Los familiares fueron derivados solamente por precaución; David está mucho más aliviado porque, por suerte, no pasó nada grave», destacó Bernardo Ballero, vocero del jugador.
Por estos días, Nalbandian continúa su recuperación tras ser operado por una hernia de disco. El regreso al circuito se demoró por una fuerte gripe; ya desistió de jugar el Masters 1000 de Madrid, que empezará mañana, y todavía no es una certeza que juegue en Roma, desde el 8 de mayo; en caso de no llegar en condiciones -aún debe recuperar masa muscular-, postergaría su vuelta para el ATP de Niza, la semana previa a Roland Garros.
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