Una familia tipo cordobesa necesitó en febrero un ingreso mensual de $27.711 para no caer bajo la línea de pobreza y $17.752 para no caer en la indigencia, según el informe mensual que realiza el Centro de Almaceneros, Autoservicios y Comerciantes Minoristas de Córdoba.
La Canasta Básica Total -que incluye además de alimentos, servicios básicos, ropa e indumentaria, educación, entre otros- se ubicó en febrero en $27.711,38, lo que significa que una familia tipo de cuatro integrantes debió contar con ingresos globales diarios que no sean inferiores a $923,71 para no ser pobre.
En tanto, la Canasta Básica Alimentaria fue de $17.752,51, lo cual quiere decir que una familia precisó ingresos globales periódicos que no sean menores a $591,75 para no ser indigente.
En febrero, el incremento de la Canasta Básica Alimentaria fue del 4,93 por ciento, mientras que la inflación medida por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) se ubicó en 4,15% en el mismo mes.
La fuerte suba se registró en la carne vacuna (25%), leche fluida y larga vida (17%), yerba mate (30%), quesos (12 %), huevos (20%), e infusiones (15%), entre otros.
Mientras que en la Canasta Básica Total los principales aumentos, además de los alimentos, se registraron en el gas envasado (14%), útiles escolares (43%), uniformes escolares (55%), medicina prepaga (4,7%), medicamentos (15%), indumentaria (16%) y calzados (12%).
En lo que va del año (enero-febrero), el aumento acumulado de los alimentos fue del 7,31 por ciento, mientras que la inflación registrada en el mismo período alcanzó el 7,01 por ciento.
El incremento acumulado interanual (marzo de 2018 a febrero de 2019) de la Canasta Básica Alimentaria fue de 64,36 por ciento, mientras que la inflación del mismo período trepó a 50,39 por ciento.
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