La casa wichi hecha por cordobeses llega a Salta fue diseñada por estudiantes de Arquitectura. La ensamblarán en Las Llanas, Chaco salteño. Ideas cordobesas para la casa de los wichis
El calor agobiante del viernes no fue un obstáculo para Tomás Gulle y Rodrigo Carnero Vidal. Junto con Agustín, hermano de Rodrigo, cargan pesados postes de madera. Dentro del galpón de la Secretaría de Planeamiento de la Universidad Nacional de Córdoba (UNC), están listos los bastidores y estructuras de madera que viajaron a la comunidad de Las Llanas, en el Chaco salteño.
Todos esos elementos forman parte de la casa wichi que Tomás, Rodrigo y Ariel Álvarez Cueto plantearon como su trabajo final de la carrera de Arquitectura de la UNC. La idea se publicó en La Voz en agosto, cuando los jóvenes necesitaban colaboración para conseguir los materiales. En ese momento, trabajaban apenas con una moladora y con un taladro en el garaje de la casa de Tomás.
Después de meses de intenso trabajo, los elementos para montar la casa llegan hoy a la comunidad Las Llanas, ubicada en el municipio de Embarcación, de Salta, al borde de la ruta nacional 81.
Allí, Tomás, Rodrigo y Ariel se instalarán por unos 15 días, hasta que la vivienda modular esté completa y habitada.
La casa es un módulo básico, que consta de una habitación, de un espacio de sombra para desarrollar sus actividades diarias y del espacio de fuego, que es la cocina. Tiene un módulo aparte, con sanitario y depósito.
La estructura está hecha con madera con un sistema de horcones, que es el principal modo constructivo wichi. Los futuros arquitectos le agregaron la técnica, e incorporaron un sistema de paneles de madera, que son bastidores con estructura interna de ramas revocada con adobe.
Además del grupo, colaborarán en el ensamblado y en la construcción voluntarios de la fundación Deuda Interna. Emilio Iosa, de esa ONG y Cordobés del Año 2013, les ayudó a plantear el “tema problema” que se convertiría en la tesis y en la vivienda.
También estarán wichis de la Misión Chaqueña, el nexo con la comunidad local. Y personas de la fundación Cielo, de Salta.
Colaboración
Luego de la publicación en La Voz, el proyecto tuvo amplia repercusión no sólo en Córdoba, sino también en la provincia de Salta. “Luego de que salió la nota, Fabián Almirón, de Planeamiento de la UNC, nos ofreció el taller y las herramientas, además de su asesoramiento. Estuvimos tres meses armando y gestionando las cosas”, cuenta Tomás.
Esa gestión consiguió contactos, que fueron donando los materiales. Así, la firma Pallcor donó todas las maderas; Juan Carlos Filippi, jefe de Mantenimiento y Redes de la Empresa Provincial de Energía de Córdoba (Epec), colaboró con postes en desuso.
La empresa Ferrocons colaboró con dinero en efectivo y con materiales para las conexiones sanitarias. Ferrero Hermanos donó todo lo necesario para la instalación eléctrica y Policía de Tránsito dio pelotas, 40 pares de zapatillas y caños. El Gobierno de Salta también colabora con fondos y con logística. En el camión, que lo aportó Transporte Lavini, llevan alimentos y ropa que les acercaron numerosas personas.
El proyecto
La historia que se materializará en la construcción de la vivienda comenzó en 2015, cuando los jóvenes se disponían a abordar la tesis de Arquitectura. La búsqueda de “algo realizable” que no quedara en renders y planos los llevó a Emilio Iosa, de Deuda Interna. Allí nació la idea de una solución habitacional.
Iosa los contactó con la comunidad Las Llanas. Luego de tres viajes y de debates con los wichis, nació la propuesta de una vivienda modular que se puede construir con elementos del hábitat salteño.
En toda la tesis fueron guiados por la docente Marcela Villarino y por Abel Adolfo Mondejar, de la cátedra de Arquitectura 6D.
“Si todo va bien, en marzo presentamos la tesis”, dice Tomás.
Fuente: La Voz
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